El presidente de Irak, Barham Saleh, denunció este miércoles el ataque de Irán contra bases militares iraquíes, donde hay soldados estadounidenses, y afirmó estar preocupado por los "desarrollos peligrosos" en la región.
"Condenamos el bombardeo con misiles iraníes que golpeó instalaciones militares en territorio iraquí. Repetimos nuestro rechazo a la violación reiterada de la soberanía estatal y a que Irak se convierta en un campo de batalla para los bandos en guerra", aseguraron voceros de su oficina.
En el mismo sentido, Mohamed Al Halbusi, jefe del parlamento iraquí, también condenó el episodio de violación de la soberanía del país en el que Irán disparó 22 misiles en represalia por la muerte del general iraní Qasem Soleimani, asesinado la semana pasada en Bagdad, durante un ataque con un dron estadounidense.
"Condenamos la violación iraní de la soberanía iraquí y confirmamos nuestro rechazo absoluto a que las partes en conflicto usen territorio iraquí para saldar sus cuentas", indicó la autoridad parlamentaria.
Al Halbusi, a su vez, hasta agosto de 2017 fue gobernador de la provincia sunita de Anbar, donde se ubica la base Ain Al Asad, la que fue atacada hace algunas horas.