Todos los años, El Lazo, una organización para jóvenes judíos del movimiento jasídico Jabad Lubavitch, con sede en Buenos Aires, Argentina, suele llevar a cabo un encuentro anual para unir a miembros de la comunidad de todas las provincias del país sudamericano.
Sin embargo, debido a la crisis de coronavirus, que actualmente golpea fuertemente a Argentina, entre otros países de la región, el evento no pudo realizarse como normalmente se hace. No obstante, la pandemia no detuvo el entusiasmo de los miembros de El Lazo y decidieron celebrar por primera vez un evento virtual para jóvenes judíos de más de 20 países del mundo.
Jóvenes de entre 18 y 35 años de Argentina, España, Uruguay, Paraguay, Venezuela, Colombia, Panamá, México, Brasil, Perú, Ecuador, Bolivia, Chile, Costa Rica, Israel, Estados Unidos, Canadá y más, participaron de un evento virtual informal y abierto.
El encuentro, que se llevó a cabo en la plataforma "Zoom", incluyó diversos eventos y actividades sociales que se desarrollaron en diferentes grupos divididos por temáticas y edades con el fin de brindarles a los participantes la posibilidad de conocer a jóvenes de su edad y conversar con ellos.
El evento fue inaugurado por el presidente de las instituciones de Jabad Lubavitch en Argentina, el rabino Zvi Greenblatt, y luego continuó con diferentes charlas y paneles a cargo de conferencistas, rabinos y líderes comunitarios.
Los jóvenes también tuvieron la posibilidad de recibir capacitaciones por parte de reconocidos empresarios que compartieron su experiencia personal para orientar financiera y económicamente a los participantes, incluso en medio de una crisis global. Los empresarios también hablaron sobre cuestiones relacionadas con la tecnología, el turismo y la tecnología, entre otros rubros.
Actuaciones en vivo de un comediante, espectáculos musicales, juegos y concursos también formaron parte de este particular evento.
El momento central del encuentro internacional estuvo a cargo de la ministra de la Diáspora de Israel, Omer Yankelevich, quien instó a los jóvenes a empoderarse, a sentirse orgullosos de ser judíos y a colaborar para afianzar la conexión de la comunidad con Israel.
El exministro de Defensa israelí, Naftali Bennett, también participó de esta conferencia y enfatizó en la enorme importancia de los jóvenes judíos en la diáspora.
Los jóvenes también experimentaron un momento particularmente conmovedor cuando Mónica Davidovicz, sobreviviente de la Shoá, compartió su historia y fascinó y emocionó a todos los participantes.
Otro relato emocionante fue brindado por la hija judía de un oficial de alto rango de Hamás, que logró escapar de las garras del grupo terrorista y del maltrato y la opresión de su padre gracias a una organización llamada Yad Laachim. La joven israelí, hija de una mujer judía y de un terrorista árabe, hoy trabaja para esta agrupación con el fin de ayudar a otras jóvenes a huir de situaciones como la que ella tuvo que atravesar.