La aerolínea Ukraine International hizo el esfuerzo de agregar el jueves unos vuelos adicionales desde Israel hasta Kiev solamente para llevar a miles de peregrinos jasídicos antes de que cierre sus puertas a los extranjeros debido a la pandemia.
Esto sucede porque el miércoles Ucrania impuso una prohibición momentánea para la mayoría de los extranjeros que quieran ingresar al país hasta el 28 de septiembre, debido a un aumento reciente en los casos de COVID-19. Esta medida comenzará a regir mañana, viernes.
El problema es que esto limita la peregrinación masiva anual de miembros del movimiento jasídico Breslov a la ciudad de Uman, donde tradicionalmente se hace una peregrinación por Rosh Hashaná (Año Nuevo Judío) hasta la tumba del fundador del movimiento, Rebbe Najman.
Al principio, Kiev había acordado admitir a un pequeño número de peregrinos después de una petición del primer ministro, Benjamin Netanyahu, pero luego decidió prohibir a todos los visitantes extranjeros.
A raíz de la decisión de Kiev, Ukraine International agregó vuelos a la capital y a Odessa antes de que el embargo entre en vigencia, lo que provocó que cientos de peregrinos israelíes se apresuraran a ir al aeropuerto Ben-Gurion en un esfuerzo por superar la prohibición.
"He estado volando a Ucrania durante los últimos siete años", dijo Elisha, una de las personas que llegaron al aeropuerto. "Si cierran las aerolíneas, llegaremos por mar; y si cierran el mar, vamos a encontrar otras formas de ir a Uman. El gobierno debería haber llegado a un acuerdo con los ucranianos, es una pena que estemos forzados a hacerlo de esta manera", agregó.
Rahamim, que también se esperaba que partiera hacia Kiev, agregó: "Me voy a Uman hasta después de Rosh Hashaná. En cuanto al COVID-19, seguiremos las pautas, vamos a seguir usando máscaras y mantendremos la distancia, no tenemos miedo. Y si no nos dejan entrar, lo aceptaremos con amor y regresaremos a Israel".
A pesar de la solicitud de Netanyahu, el zar del coronavirus de Israel, el profesor Ronni Gamzu, escribió personalmente al presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskiy, para pedirle que prohibiera la peregrinación, ya que dio a entender que se trata de "un peligro que amenaza la vida".
"Lo he dicho varias veces y no quiero volver a hablar de esto. No cambiaré de opinión", dijo Gamzu sobre la peregrinación.
Decenas de aspirantes a peregrinos están muy molestos, así que el jueves se dirigieron al hotel en Safed donde se alojan Netanyahu y su esposa, para protestar contra la prohibición de Ucrania. Acusaron al primer ministro de intervenir con Zelenskiy para activar la prohibición.
"Sólo somos personas respetuosas de la ley que queremos visitar a nuestro bendito y santo rabino en Uman", expresó uno de los manifestantes, y también agregó: "Estamos aquí para alzar la voz sobre la gran humillación que nos propinó (referido a Netanyahu). Cada semana, decenas de miles de personas protestan, pero nosotros, que somos decenas de miles que queremos llegar a Rabbe Nachman, se nos niega un derecho básico." Agregó que Netanyahu "pagará caro por esto", al igual que los partidos políticos ultraortodoxos.