Después de que se difundieran una serie de rumores el fin de semana respecto de un ataque incendiario en la tumba de la reina Esther y Mordechai en Irán, funcionarios del gobierno iraní confirmaron que se desató un incendio en el sitio, ubicado en la ciudad de Hamadan, al oeste del país.
El lugar sagrado es muy importante entre los sitios de peregrinación para los judíos de Irán. Según las autoridades iraníes no se registraron daños a las tumbas, pero en las imágenes publicadas por la agencia de noticias oficial de la República Islámica, IRNA, se puede observar con claridad que, efectivamente, se produjeron daños en el lugar.
En las fotografías aparecen, además, miembros de la comunidad judía local para evaluar los daños causados en el sitio.
Según la investigación de las autoridades iraníes, cámaras de seguridad ubicadas en el lugar captaron a un grupo de personas intentando ingresar al sitio sagrado a través de un banco cercano para “llevar a cabo una serie de acciones” allí, pero según los iraníes, fracasaron en su intento.
De acuerdo con el informe, las cámaras lograron captar los rostros del grupo de personas en cuestión, pero su identidad y el motivo del hecho aún se desconocen. Las autoridades manifestaron que están buscando a los sospechosos.
A pesar de que las autoridades señalaron desconocer el motivo del ataque, medios de comunicación iraníes informaron que aparentemente se trató de un crimen de odio contra los judíos y contra el Estado de Israel, debido a que el ataque fue perpetrado el 15 de mayo, la fecha del calendario gregoriano del 72° aniversario de la independencia del Estado judío.
El presidente de la Liga Antidifamación (ADL, por sus siglas en inglés) Jonathan Greenblatt, condenó el incidente y manifestó su esperanza de que las autoridades iraníes atrapen a los autores de lo que llamó “un acto antisemita” y lleve a juicio a los perpetradores. Greenblatt también pidió al gobierno de Irán que proteja los sitios sagrados de las minorías religiosas del país.
El coordinador de la lucha contra el antisemitismo del gobierno de Estados Unidos, Elan Carr, también condenó el ataque, que según indicó, se llevó a cabo “luego de que se realizaran amenazas en febrero”. El funcionario agregó que “el régimen iraní es el patrocinador principal del antisemitismo. Irán debe dejar de incitar al odio, y proteger a la comunidad judía y a otras minorías que viven en el país”.
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Las autoridades iraníes señalaron que se registraron daños en el lugar, pero las imágenes muestran lo contrario.
(IRNA)
