El viceministro de Asuntos Exteriores de Polonia expresó este lunes su deseo de que Israel cambiara su "enfoque" respecto al proyecto de ley sobre reclamaciones de restitución de la Segunda Guerra Mundial que el Estado judío ya ha calificado como "inmoral".
El proyecto de ley, que fue aprobado por la Cámara Baja del Parlamento la semana pasada, pretende ofrecer una mayor seguridad jurídica a los propietarios frente a las reclamaciones históricas que se remontan a la ocupación nazi.
Sin embargo, las voces mas críticas afirman que el proyecto podría impedir que los judíos reclamen los bienes confiscados durante el Holocausto.
El viceministro de Asuntos Exteriores, Pawel Jablonski, habló después de que la encargada de negocios de Israel en Varsovia, Tal Ben-Ari Yaalon, fuera convocada al Ministerio de Asuntos Exteriores polaco para ser informado sobre la nueva ley.
Jablonski aseguró en una sesión informativa televisada que las críticas israelíes eran "inapropiadas" y que esperaban que "el enfoque israelí cambie".
Las reclamaciones de los judíos por sus propiedades quedaron congeladas durante la época comunista y, a diferencia de otros países de la región, Polonia nunca ha contado con una ley integral de reclamaciones de restitución desde la caída del régimen comunista en 1989.
Algunas familias que perdieron sus propiedades solicitaron la restitución o la compensación, pero el proceso es tan caótico y largo, que muchas veces no llega a terminarse.
La nueva ley establece una fecha límite para algunos recursos legales de hasta 30 años. Esto significa que si una persona compró una propiedad de antes de la guerra en 1989 y tiene una confirmación oficial específica de esa época que demuestre su derecho a poseerla, cualquier propietario histórico anterior quedará ahora excluido de impugnar ese derecho.
Jablonski dijo que los críticos en Israel "se refieren a la cuestión del Holocausto, que esta ley no aborda de ninguna manera. Esto demuestra, tengo la impresión, un desconocimiento de los hechos", además de asegurar que "la ley no va contra nadie".
La embajada israelí en Varsovia había declarado anteriormente que "esta ley inmoral afectará gravemente a las relaciones entre ambos países" además de acusar a Polonia de "impedir la restitución de los bienes judíos o las solicitudes de indemnización de los supervivientes del Holocausto" con esta nueva ley, que todavía deberá ser aprobada por el Senado.