Un joven de 16 años fue arrestado este jueves por supuestamente planear un ataque con explosivos en dos escuelas de la ciudad de Essen, al oeste de Alemania.
La detención se pudo realizar gracias a una denuncia en la que se advirtió a la Policía que el adolescente manifestó su intención de colocar una bomba en su escuela. Según Welt, se trataría de un compañero de clase del sospechoso.
Tras la denuncia, los oficiales registraron ambos centros educativos, donde ese día se suspendieron las clases y están programadas para reanudarse este viernes, pero no encontraron artefactos explosivos.
En el domicilio del joven, se hallaron armas de fuego de fabricación casera, una ballesta y material utilizado para fabricar bombas artesanales. La Policía también descubrió runas de las SS y numerosos manuscritos de extrema derecha, antisemitas y antimusulmanes.
Por su parte, el ministro de Interior de Renania del Norte-Westfalia, Herbert Reul, afirmó durante una conferencia de prensa que hay indicios de que el sospechoso tiene problemas mentales y pensamientos suicidas.
"Los registros encontrados se pueden leer como una llamada de auxilio de un joven", expresó el funcionario.
Asimismo, el viceprimer ministro local, Joachim Stamp, agradeció a la Policía por "impedir un presunto atentado terrorista nazi".
"Todos los demócratas tienen la tarea común de luchar contra el racismo, el embrutecimiento y el odio", aseveró.
El sospechoso fue interrogado durante el jueves por la Policía, al igual que sus padres.
