Con el objetivo de aumentar la tasa diaria de pruebas de coronavirus, el servicio médico nacional Maguen David Adom (MDA) abrió el primer complejo de pruebas médicas ambulatorias de Israel.
Instalado en un estacionamiento grande del parque HaYarkon de Tel Aviv, y con la constante colaboración de personal de bomberos en tareas de desinfección, se acondicionaron cinco pistas en el que personas con síntomas leves se realizan el test de coronavirus sin bajarse de sus automóviles.
En una primera instancia presentan la citación emitida por el Ministerio de Salud, y metros más adelante un voluntario del MDA le realiza una extracción de mucosa bucal y nasal a través de la ventanilla del conductor. Finalizada la prueba el paciente regresa a su hogar para continuar su período de aislamiento domiciliario preventivo, y días después recibirá los resultados del estudio.
Unas 300 personas serán evaluadas en este complejo como parte de una prueba piloto que intentará replicarse en otros puntos del país con un objetivo claro: aumentar drásticamente la cantidad de pruebas de coronavirus en Israel, una de las cuestiones centrales para combatir la pandemia.
“Cuando logremos desplegar más instalaciones buscaremos llegar a diez mil pruebas diarias”, explicó Rafael Strogo, director médico del MDA, quien en función de los resultados de este ensayo en Tel Aviv determinará cuántos complejos más se abrirán, y en qué sitios.
La tarea es realizada por voluntarios del MDA y estudiantes de medicina. “Es estresante, pero al mismo tiempo emocionante”, manifestó uno de ellos a Ynet. “Estamos aquí para ayudar a la población, pero por otro lado no nos olvidamos de que hay mujeres e hijos esperándonos en casa al final del día”, reflexionó.