El Ministerio de Medio Ambiente de Israel advirtió que en las próximas horas se evidenciará una alta contaminación del aire a lo largo del país, al mismo tiempo que el servicio meteorológico anticipó que el fin de semana caerá gran cantidad de lluvia, acompañada de tormenta eléctrica y granizo.
Según informó el ministerio, "las tormentas de polvo llegan desde el norte de África, y en las próximas horas recrudecerán". Se trata de un frente ventoso del sudoeste que levanta grandes cantidades de polvo desde el norte de Egipto hacia Israel y que exige a la ciudadanía tomar ciertos recaudos: "En consulta con el Ministerio de Salud, se recomienda a la población que evite realizar actividad física extenuante al aire libre, especialmente a pacientes cardíacos, ancianos, niños y mujeres embarazadas", anunciaron las autoridades medioambientales.
Se espera que esta contaminación se disipe en las próximas horas, con el comienzo de las lluvias, que para mañana volverán más respirable el aire israelí, aunque al mismo tiempo podría generar nuevos inconvenientes: "Desde esta tarde, y especialmente mañana, un bloque de aire frío regresará a nuestra área y causará lluvias serias, granizo y tormentas eléctricas durante casi tres días", pronosticó el meteorólogo Tzaji Wachsman en el estudio de Ynet.
"Estamos a punto de experimentar algo similar a lo que vimos el fin de semana pasado. Es una buena noticia para la industria del agua, pero también puede generar situaciones desagradables en términos de inundaciones y daños por el viento", advirtió Wachsman, al hacer referencia a episodios recientes.
Las fuertes lluvias de los últimos días provocaron que aumentara el caudal de agua del Mar Kineret, que en relación con la misma fecha del año pasado creció 3,09 metros. "Esperamos que esta tormenta eleve el Kineret al menos otros 10 centímetros, lo que sin dudas sería una cantidad impresionante", sostuvo el meteorólogo.