Después de otro día de violentos enfrentamientos con la policía, el líder de Degel HaTorah, el parlamentario Moshe Gafni, publicó anoche (domingo) un mensaje del líder espiritual de la corriente lituana de la comunidad ultraortodoxa, el rabino Chaim Kanievsky. "Me pidió que yo dijera en su nombre que estas manifestaciones deben detenerse, y pidió a la policía israelí que detuviera las cosas horribles que les están haciendo a los residentes inocentes de Bnei Brak”, manifestó Gafni en una reunión de emergencia celebrada en la Municipalidad de esa ciudad predominantemente ultraortodoxa. El alcalde de Bnei Brak, Avraham Rubinstein, llamó a la policía a abandonar la ciudad, y luego él mismo fue atacado.
(Daños producidos al tren ligero de Jerusalem)
La violación de las pautas del tercer cierre destinado a detener la propagación del coronavirus provocó ayer numerosos enfrentamientos entre miembros del sector ultraortodoxo y la policía. Se estima que en Jerusalem algunos manifestantes del sector haredí vandalizaron la estación del tren ligero Shivtei Israel y un vagón que se encontraba allí, en tanto que otros protestaron contra el cierre de las instituciones ortodoxas en la ciudad. Durante la manifestación, los vehículos estacionados y otros que intentaban pasar por el área de la concentración sufrieron daños. Además, un grupo de jóvenes arrojó piedras a un autobús en Bnei Brak, por segunda vez en la ciudad en pocas horas, y luego lo incendiaron. El conductor resultó levemente herido. La policía acudió al lugar y dispersó a la multitud utilizando granadas aturdidoras.
Tras la reunión de emergencia en la Municipalidad de Bnei Brak, el alcalde Rubinstein acudió a una concentración y fue expulsado por cientos de vecinos, que se reunieron en el lugar y lo insultaron. Según testigos, varias personas se acercaron al automóvil del alcalde y le arrojaron gas pimienta para que abandonara la zona.
La policía de Jerusalem se refirió a los actos de vandalismo en el tren ligero. “Se recibió un informe de que la estación de Shivtei Israel estaba dañada, algunas de las ventanas del tren que se encontraba allí estaban pintadas y se colocó un obstáculo en la vía. Como resultado, la estación y las ventanas del tren resultaron dañadas. Los oficiales que llegaron al lugar comenzaron la búsqueda de los sospechosos”, manifestó la policía.
(Violentos incidentes entre policías y manifestantes ultraortodoxos en Bnei Brak)
La empresa Citypass, que opera el tren ligero, señaló que los vándalos habían vertido concreto en las vías y que esto podría haber causado que los vagones volcaran con los pasajeros adentro.
Además, manifestantes ultraortodoxos participaron en una protesta que incluyó el bloqueo del tránsito vehicular, causando daños a la infraestructura y arrojando piedras a los vehículos en el área de la Plaza Hashabat, en Jerusalem. Dos personas involucradas en los disturbios fueron detenidas.
En otro incidente en Bnei Brak, un autobús fue apedreado y luego un grupo de jóvenes subió al vehículo, vació los extintores y robó el equipo del conductor, que huyó. Ayer por la tarde también se produjeron incidentes en el barrio Mea Shearim de Jerusalem y Ashdod, donde la policía detuvo a unas 16 personas y 13 agentes resultaron levemente heridos.
Anoche, un autobús en Bnei Brak fue vandalizado. El conductor fue rociado con gas pimienta y resultó levemente herido. Fue trasladado por paramédicos al Hospital Sheba, cerca de Tel Aviv. Los atacantes, que aprovecharon la ausencia de fuerzas policiales en la zona, también prendieron fuego al autobús. El fuego alcanzó los cables eléctricos y provocó un corte de energía en el área. Luego, policías de la ciudad acudieron al lugar para dispersar a la multitud utilizando granadas aturdidoras.
Los disturbios y enfrentamientos en Bnei Brak comenzaron el jueves pasado, luego de que varios jóvenes arrojaran piedras contra tres policías que se encontraban dentro de un móvil policial. Cuatros de los involucrados en los ataques se entregaron a la policía el sábado.
