Como cada año, también en esta festividad de Purim desfilaron centenares de personas disfrazadas por el bulevar Rothschild de Tel Aviv.
Sin embargo, este año no asistió tanta gente como años anteriores. Esto se debe al brote de coronavirus que también ha golpeado a Israel.
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A pesar del brote del coronavirus, algunos israelíes salieron a celebrar
(Moti Kamahi)
“Yo no estoy preocupado por el coronavirus”, afirmó Ofek Ron, de Raanana, que se disfrazó de Batman. “Yo no entiendo. ¿En serio la gente no se disfraza en este Purim? No sé por qué se quedaron en casa. Este es un lugar abierto. Hay que seguir con la vida, no se puede estar todo el tiempo temiéndole al virus”, añadió.
La esposa de Ofek, Avdá, comentó que ella sí se cuida y siempre lleva alcohol en gel en su bolso. “Nosotros estamos felices de no ser los únicos con disfraces, pero es realmente decepcionante. Hay un ambiente festivo, pero un poco menos de lo habitual”, manifestó.
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Las mascotas también participaron del desfile de disfraces en el bulvar Rothschild
(Moti Kamahi)
Nofar y Yuval, que estaban disfrazados del Guasón y Harley Quinn, manifestaron que fueron al bulevar Rothschild después de que se cancelaran tres fiestas a las planeaban asistir. “No teníamos nada mejor para hacer que venir aquí. Estamos bastante decepcionados”, afirmaron. “Yo no veo todo el asunto como lo presentan. Me resulta muy mediático. No lo sé, así lo veo yo", agregó Yoav.
Durante todo el recorrido por el bulevar Rothschild, aparecieron cientos de personas disfrazadas. La mayoría de ellas aseguró no temerle al al brote del virus. “Yo fui quien propagó el coronavirus. Yo vuelo por todo el mundo y lo disemino”, expresó Omer, quien llevaba puesto el disfraz de Superman. Shirli sostuvo: “Dicen que no se contagia al aire libre, y aquí estamos al aire libre”.
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Dos jóvenes se disfrazaron de científicos que "descubrieron la cura del coronavirus"
(Moti Kamahi)
Algunas personas utilizaron un disfraz relacionado con el brote del coronavirus. Dos jóvenes disfrazados de científicos deambulaban por el bulevar diciendo que habían descubierto la cura de la enfermedad y llevaban jeringas en sus manos que contenían arak (una bebida alcohólica típica del Medio Oriente). “Debíamos estar en el exterior”, manifestaron los simpáticos “científicos” en un momento de seriedad. “Pero debido al aislamiento, decidimos quedarnos en Israel y hacer lo mejor que podemos. Es decepcionante, ya que podríamos decir que Purim casi se canceló. Pero está bien que el Estado tome las medidas necesarias" para lidiar con el asunto de la mejor manera.
