Desde el Servicio de Empleo estiman que ya terminó la primera oleada de desempleos provenientes de la industria del turismo y el ocio. Shai Badad, director general de finanzas afirmó, desde el estudio de Ynet: "Ni en nuestras peores pesadillas nos imaginamos un número así.
Antes del estallido de la crisis por el coronavirus, la tasa de desempleo era de alrededor del 4%. Como resultado ese número se cuadruplicó y hoy asciende al 16.5%. Babad agregó: "Mientras continúe la cuarentena, muchos trabajadores estarán en situación de 'licencia sin goce de sueldo' y tendrán que recibir los beneficios por desempleo”.
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El Mercado de Carmel en Tel Aviv, cerrado debido a las nuevas pautas de aislamiento.
(Roy Rubinstein)
Sobre las pequeñas empresas, dijo: "Hasta ahora hemos postergado los pagos de la hipoteca, el IVA, los servicios de luz y agua, impuestos a la propiedad. Además se otorgó una subvención a las pequeñas empresas y se estableció un fondo de préstamos”. Babad reconoció: "Sabemos que todas estas medidas aún son insuficientes".
En los próximos días el ministro de Finanzas evaluará un paquete de medidas para desempleados y trabajadores autónomos “con el objetivo de dar una respuesta a todos, incluso si no es la respuesta ideal”. Y concluyó: “haremos lo posible para pasar esta situación y preservar la estructura económica israelí, para que cuando todo termine esta situación, volvamos a crecer”.
El fin de semana, el director general del Servicio de Empleo, Rami Grauer, estimó que "si continuamos a este ritmo, es probable que lleguemos a un millón de desempleados, una cuarta parte de los trabajadores de la economía". A la preocupación acerca de si los pagos iban a llegar antes de Pesaj, Grauer respondió: “Todos los esfuerzos en este momento, están puestos en relación a la celebración y a garantizar antes de esa fecha el derecho que les corresponde a los ciudadanos”.
