"Las Fuerzas de Defensa de Israel son un ejército de valores. El aumento en el consumo de carne tiene consecuencias negativas y la decisión de aumentar su cantidad debe ser reconsiderada". Así afirma el mensaje con el que 862 miembros del ejército, entre soldados y personal de apoyo, en un gesto de protesta inusual, solicitaron al jefe de Estado Mayor, Aviv Kochavi, que revea la decisión de aumentar un 30% la ración de carne que se sirve en las bases.
La carta, que lleva los nombres, apellidos y números de soldado de sus firmantes, señala: “No tenemos dudas de que detrás de la decisión hay una intención noble de darnos una mejor respuesta en el tema de la alimentación. Entendemos la conexión entre seguridad alimentaria y seguridad nacional, especialmente en tiempos de crisis como esta, pero pensamos que la decisión se debe revaluar”.
Según el plan de la División de Tecnología y Logística de las FDI, la dosis diaria de proteína animal aumentará a partir de noviembre de 100/120 gramos a 140/150 por día. La decisión se tomó en función de una serie de encuestas realizadas a combatientes y en base a las auditorías llevadas a cabo en diversas bases del Ejército.
Una oficial superior del Ejército reveló días atrás en diálogo con Ynet que se estima que el número de soldados veganos y vegetarianos en las FDI asciende este año a 10.000. Las FDI ofrecen una variedad de opciones, alimentos ricos en vegetales e indumentaria adecuada. Sin embargo, el consumo de carne del Ejército demanda unas 500 toneladas mensuales, por lo que aumentar su ración tiene un impacto en la industria.
"La decisión de incrementar el consumo de carne tiene consecuencias ambientales, sanitarias y morales", afirma la carta de los soldados. “La industria de la carne es una de las más contaminantes y pone en peligro el futuro de todos nosotros. Hoy queda claro que la crisis climática no es la predicción de científicos pesimistas sino una realidad que está cada vez más presente en nuestras vidas, y tiene consecuencias devastadoras", añade.
Según afirmaron en su mensaje, a diario puede verse el desperdicio de carne que va a parar a los contenedores de basura de las cocinas militares. Algunos soldados publicaron a través de sus redes sociales fotos que dan cuenta de esta situación.
La carta de los soldados se suma a otro mensaje enviado días atrás por organizaciones ambientalistas y de defensa de los animales que apelaron a las FDI para que vuelvan atrás con la decisión e incluso adopten la medida ya presente en diversos organismos del Estado, incluidos ministerios, de tener un día a la semana libre de carne en el menú.
Desde las FDI explicaron la medida afirmando que “la respuesta nutricional para los soldados fue diseñada por profesionales en el campo de la alimentación, la nutrición y la medicina, de acuerdo con las directrices del Ministerio de Salud, adaptando la propuesta alimenticia para los combatientes cuya dieta es similar a la de los deportistas de alto rendimiento”.
En la respuesta del Ejército a esa primera carta de organizaciones ambientalistas, se señaló también que “la cantidad de valores nutricionales en el menú diario en general y de proteína en particular se ajustan al nivel de carga física al que está expuesto el soldado a lo largo de su servicio”. Y concluyeron: “El aumento en la cantidad de carne es solo una parte de la propuesta, en paralelo a un incremento en las fuentes de proteína vegetal. Las FDI trabajan para dar una respuesta adecuada a las diversas poblaciones que sirven a su Ejército incluso en materia nutricional, entre ellos celíacos o quienes consumen alimentos estrictamente kosher”.
