"Estábamos hartas de ser las únicas mujeres en la habitación", dijo a Calcalist Orit Alperovitz, cofundadora y CEO del club de inversores ángeles israelíes NEOME, exclusivo para mujeres.
Alperovitz fundó NEOME en 2017 junto con Inbal Polak, quien se desempeña como su directora de inversiones. Alperovitz se desempeñó como asesora legal de instituciones financieras y actualmente trabaja principalmente con la Fundación Edmond de Rothschild. Polak se desempeñó como analista en Standard & Poor's (S&P) y más tarde en el banco de inversión multinacional suizo UBS Group AG. Actualmente, también se desempeña como directora en YRD Capital y asesora externa para firmas de capital privado y fondos de cobertura.
Incluso en la bolsa de valores, dijo Polak, el 98% de los clientes son hombres responsables del fondo familiar, incluso cuando ambos cónyuges tienen el mismo conocimiento del mercado. “La mujer podría optar por involucrarse de lleno en la compra de un apartamento pero no en la gestión de fondos compartidos”, explicó.
Antes de establecer NEOME, Polak y Alperovitz se propusieron investigar si la falta de mujeres inversionistas también afecta a las empresas. "Encontramos una correlación directa", dijo Polak, "especialmente con las startups que recién comienzan, ya que sus primeros patrocinadores son a menudo inversores ángeles que eligen apoyar a alguien que se parece a ellos o, un producto que les gusta y personalmente usarían”.
A pesar de que se metieron en este proyecto muy preparadas, los resultados de su investigación las dejaron en shock. “Solo el 2% de todo el capital de riesgo llega a mujeres emprendedoras”, dijo Polak. Y con las tech startups (startups tecnológicas), las cifras son incluso peores que en otros campos, agregó. Pero cuando se trata de moda, los inversores asumen que un perfil de mujer emprendedora conoce el campo, entonces es más probable que invierta.
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Las co-fundadoras de NEOME, Inbal Polak (izquierda) y Orit Alperovitz.
(Foto: Orel Cohen)
¿Cómo funciona el club?
NEOME comenzó con siete miembros originales, seleccionados por Polak y Alperovitz. Ahora, tiene 50 miembros que han realizado cinco inversiones hasta la fecha. Todos los miembros se reúnen una vez al mes para discutir posibles inversiones y algunos de ellos lideran activamente las inversiones del club y mantienen una conexión directa con los empresarios.
El club se fundó con el propósito explícito de lograr que más mujeres participen activamente en inversiones. "A lo largo de nuestras carreras, contamos con tan solo una mano la cantidad de mujeres que administran fondos", dijo Polak, "el 95% de las personas en este campo son hombres".
“Con nosotras, las miembros pueden elegir y entender por qué eligieron una inversión en particular. En nuestras charlas, nos dimos cuenta de que muchas de ellas quieren aportar su experiencia a las empresas al inicio de sus recorridos. Así que dejamos que no solo inviertan, sino que participen activamente en la creación de estrategias para la empresa.
“El club permite que cada miembro elija en qué empresas y en qué medida quiere participar, desde los procesos de diligencia debida hasta unirse a la junta “.
"No somos un pequeño grupo de ángeles (inversionistas)", dijo Polak, "nuestras inversiones no se basan en conexiones personales, es una operación completa y a veces el networking pueden valer más que unos u$d 100,000”.
La visión de NEOME
"No se trata solo de hacer la mejor inversión posible", dijo Alperovitz. "También queríamos ver cómo podíamos marcar una diferencia. Preguntándonos cómo, a través de este club y juntando con nuestro dinero para alcanzar una suma significativa, podemos cambiar la percepción de la igualdad de género, y hacer que el mercado se dé cuenta de que la diversidad es el camino correcto a seguir. Es muy importante, y comienza por quiénes son los inversores. Son las personas con las que se sienta desde el principio para tomar decisiones, son parte del ADN de la empresa.
Polak y Alperovitz, también son miembros de otro club de inversores llamado Astia Angels, que invierte exclusivamente en startups que tienen al menos una mujer en su equipo de liderazgo.
La startup en Israel
NEOME es, en muchos sentidos, un pájaro exótico dentro de la naturaleza tecnológica israelí. Ya que no solo es un club para mujeres, también se diferencia como un “club de inversores” y no como un “grupo ángel”, que es algo mucho más común. Polak y Alperovitz ven esto como una ventaja.
"El mercado israelí es un mercado basado en fondos ya que hay menos inversores ángeles aquí", dijo Alperovitz, "pero creemos que hoy, en muchos lugares del mundo, las empresas que se encuentran en sus primeros, pasos no pueden manejar una inversión de capital de riesgo”.
