El Tribunal de Magistrados de Jerusalem condenó este lunes 8 de agosto al ex ministro Yaakov Litzman a ocho meses de libertad condicional y una multa de 3.000 shekels, unos dos meses después de haber sido declarado culpable de abuso de confianza. Esto fue después de que Litzman confesara como parte de un acuerdo de culpabilidad por tratar de evitar la extradición a Australia de Malka Leifer, acusada de pedofilia.
El juez Joshua Zimmerman señaló antes de leer el veredicto que las acciones de Litzman "no causaron un daño concreto". Agregó que "ésta no es una actividad corrupta e intensiva a lo largo de los años". Litzman agregó, luego de que se leyó el veredicto, que respetaba la decisión del juez.
Los abogados defensores de Litzman, Jacques Chen y Noa Firer, declararon: "Agradecemos al tribunal por aceptar nuestros argumentos en profundidad y detallados, y respetar el acuerdo que alcanzamos con la Oficina del Fiscal del Estado. Este es un caso que, después de una audiencia que tuvo lugar con un corazón abierto y un alma dispuesta, se redujo a un asunto en el que el rabino Litzman confesó y asumió la responsabilidad".
El Movimiento por un Gobierno de Calidad, que se opuso al acuerdo de culpabilidad, señaló: "Una vez más, el tribunal aceptó un acuerdo de culpabilidad indulgente y vergonzoso firmado con un funcionario y causó un daño real a las víctimas de agresión sexual. Esta conducta y los acuerdos de culpabilidad excesivamente indulgentes con los funcionarios electos socavan gravemente la capacidad de las agencias de aplicación de la ley para desempeñar sus funciones adecuadamente, socavan la confianza del público en el sistema y destruyen el elemento de disuasión. Todos pagaremos el precio de esta conducta".
Litzman, que sirvió en la Knesset durante 23 años y durante casi una década dirigió el Ministerio de Salud, renunció al parlamento israelí aproximadamente una semana antes de su condena, tras la firma del acuerdo de culpabilidad en enero pasado. Durante la etapa de investigación de las acusaciones en su contra, Litzman negó haber cometido el delito que se le imputaba, alegando que, en relación con la ayuda que le brindó a Leifer, que a menudo responde a las solicitudes de ayuda que llegan a su oficina. Incluso calificó las acusaciones como una "difamación falsa".
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Malka Leifer, finalmente extraditada a Australia para que se la juzgue por pedofilia.
(Amit Shabi)
Litzman era sospechoso de tratar de ayudar a Leifer, de quien afirmó que no era apta para ser juzgada, para evitar la extradición a Australia, donde fue acusada de graves delitos sexuales contra estudiantes. Finalmente fue extraditada en enero del año pasado. En el segundo asunto, que se cerró como parte del acuerdo, la sospecha era que usó su poder para ayudar a un asociado en el negocio de alimentos.
En el momento de la condena de Litzman hace dos meses, el abogado Danny Whitman, el fiscal de distrito de Jerusalem, declaró que "el acusado confiesa el delito de abuso de confianza. Según los hechos, como parte de su papel como ministro y viceministro en el Ministerio de Salud, se aprovechó de su posición y se acercó al psiquiatra del distrito en un intento de influir en él para que presentara una opinión diciendo que Malka Leifer, acusada de delitos sexuales contra sus estudiantes, no sería extraditada a Australia.
"El ministro ha movilizado su poder e influencia en un campo que es completamente profesional: la salud mental. En realidad, todo viola los valores que el delito de abuso de confianza busca proteger. No había interés financiero ni interés personal. Sus acciones no causaron ningún daño, la opinión no fue sesgada. Los acusados recurrieron a los psiquiatras en dos oleadas, pero ésta no es una actividad corrupta intensiva. El acusado asumió la responsabilidad de lo que había hecho. Asumir la responsabilidad de estas acciones de un hombre de alto rango tiene un valor real, incluso para la sociedad", añadió Whitman.
