La familia de Naama Issachar, ciudadana israelí condenada a 7 años de prisión en Rusia por trasladar 9 gramos de cannabis, presentó un escrito en la Corte Suprema de Israel para que deje sin efecto una decisión del ministro de Justicia que puede perjudicar la situación procesal de la joven israelí.
El ministro Amir Ohana ayer autorizó la extradición a Estados Unidos del ciudadano ruso Alexei Borkov, detenido en Israel y acusado de delitos informáticos, lo que implica un perjuicio para Naama ya que se considera que los dos casos están relacionados a nivel diplomático entre el gobierno israelí y su par ruso.
La petición firmada por el abogado Boaz Ben Tzur exige ordenar a Ohana que "examine las alternativas propuestas a la extradición de Borkov para perjudicar lo menos posible al peticionante" y retrasar la extradición del hacker ruso "a la espera de una solución del caso Issachar".
Tras calificar de "pena desproporcionada" a los 7 años y medio de prisión que le dictó la justicia rusa a Naama, el escrito argumenta que esto se relaciona con "intereses extranjeros para evitar la extradición de Borkov a Estados Unidos", por lo que asegura que Issachar está presa debido a su condición de ciudadana israelí.
"Es una herramienta en manos de las autoridades rusas, una rehen de una disputa entre dos países extranjeros", sintetiza el documento presentado en las últimas horas del jueves.
Luego de la presentación del documento al máximo tribunal israelí, desde la familia Issachar expresaron su esperanza de que "los honorables jueces de la Corte Suprema escuchen atentamente la solicitud de Naama, quien desde hace siete meses es rehén, y que ayuden a sacarla de ese infierno lo antes posible."