La Autoridad Palestina (AP) aseguró este lunes que recortará los salarios pagados a sus empleados en respuesta a una escasez de efectivo exacerbada por una renovada disputa con Israel sobre los pagos que hace a los palestinos detenidos en cárceles israelíes.
Israel y Estados Unidos, por su lado, afirmaron que los estipendios de la AP, que se distribuyen mensualmente a los presos, a sus familiares y a las familias de los palestinos muertos por cometer atentados contra israelíes, fomentan más violencia.
La deducción suele suponer alrededor del 7% de los ingresos fiscales mensuales de la AP, que constituyen más de la mitad de su presupuesto
Los palestinos, en cambio, consideran los estipendios una forma de bienestar para los reclusos a los que consideran "héroes nacionales".
Tratando de presionar a la AP para que ponga fin a los pagos, Israel comenzó en 2018 a deducir el valor de los estipendios del dinero de los impuestos que recauda en nombre de los palestinos y que les transfiere mensualmente.
La deducción suele suponer alrededor del 7% de los ingresos fiscales mensuales de la AP, que constituyen más de la mitad de su presupuesto.
"Estas continuas deducciones nos ponen en una situación financiera difícil, pero seguiremos trabajando para conseguir todos nuestros fondos", comentó el primer ministro Mohammad Shtayyeh a su gabinete en Ramala, Cisjordania.
Poco después de que Shtayyeh hablara, su Ministerio de Finanzas anunció que muchos de los 140.000 empleados de la AP en Cisjordania y Gaza verían recortados sus salarios de noviembre en un 25%, una cantidad que, según contó, se pagará con retraso una vez que Israel libere los fondos retenidos.
El Ministerio de Finanzas de Israel, que gestiona las transferencias de impuestos a la AP en virtud de los acuerdos de paz provisionales, no hizo comentarios sobre los recortes salariales.