El profesor Nachman Ash, director general del Ministerio de Salud, dijo el miércoles que 71.593 israelíes dieron positivo por coronavirus en el último día, pero agregó que creía que las cifras reales eran mucho más altas.
Al abordar otro pico de contagios que rompe los récords anteriores en Israel, alimentado por la variante Ómicron altamente transmisible, Ash le dijo a la radio del Ejército que estima que la cantidad real de infecciones podría estar en 200.000.
El ministerio no informó el recuento de casos diarios por tercer día consecutivo, alegando una "sobrecarga" en sus sistemas informáticos debido a la gran cantidad de infecciones reportadas. Ash dijo que esperaba que el problema se resolviera lo antes posible.
“Esta ola nos desafía a cada paso. En los testeos, los aislamientos, los sistemas informáticos, los hospitales, estos números son inmensos y nos siguen poniendo a prueba”, afirmó.
El funcionario señaló además que los hospitales israelíes atienden a 1.591 pacientes con coronavirus, 526 de ellos en estado grave. Ash señaló en una entrevista el martes que creía que la ola de Ómicron comenzaría a ceder dentro de una semana.
Los funcionarios del Ministerio de Salud han estado deliberando en los últimos días sobre si derogar el requisito del Pase Verde y permitir que aquellos que no están completamente vacunados ingresen a lugares y eventos públicos.
El ministro de Finanzas, Avigdor Liberman, se unió el martes al llamado para desechar el documento que permite que las personas con esquema completo de vacunación o recuperados de la enfermedad ingresen a los lugares públicos, ya que la rápida propagación de la escurridiza variante lo vuelve obsoleto.