Con el país sumido en una segunda ola de coronavirus, la tasa de desempleo de Israel casi se ha duplicado en el último mes, pasando del 4,5% al 7,6%, según un informe publicado el martes por la Oficina Central de Estadísticas.
El organismo encuestó a 1.400 empresas de diversas industrias que tienen al menos cinco empleados asalariados y encontró un aumento en los despidos en toda la economía, con los picos más extremos en profesiones técnicas y de transporte.
La industria de alimentos y bebidas fue la que despidió más trabajadores durante las dos primeras semanas de julio, constituyendo el 13,5% del número total de desempleados, seguida por la industria de la construcción, que representó el 10,8%.
El porcentaje de israelíes en la fuerza laboral cayó del 81,5% a mediados de junio a solo el 79,6% en un mes.
Según el informe, solo el 7,3% de los trabajadores aún se encuentran suspendidos, por debajo del 8,4% en junio, luego de que el gobierno lanzó incentivos para que los empleadores mantengan al personal. Aun así, el ritmo al que los trabajadores despedidos ha regresado a sus puestos de trabajo se ha ralentizado en comparación con los meses anteriores.
Además, casi el 20% de las empresas creen que sufrirán una pérdida del 50% de sus ingresos en los próximos meses.
Entre las compañías encuestadas, el 38,6% atribuye sus predicciones a una reducción en la demanda local, mientras que el 17,6% culpa a las políticas gubernamentales y las directivas de salud. Otra causa citada por los dueños de negocios por sus pérdidas estimadas es la falta de flujo de efectivo y crédito.
Casi una cuarta parte de las empresas informaron que se retrasó o canceló la contratación de personal adicional.
La encuesta arrojó que el 23,8% aseguró que había mejorado su capacidad tecnológica para confiar en el trabajo a distancia, con la mayoría de las mejoras encontradas en las industrias de la alta tecnología y las finanzas.
El informe mencionó que el 18,6% de las empresas se ha desplazado a nuevos mercados o ha recurrido a una nueva clientela. Otro 18,5% comunicó haber introducido el trabajo por turnos, mientras que el 18,3% ha comenzado a realizar entregas a domicilio de sus productos y el 14% ha movido sus negocios a internet.
El informe indica que el 56,3% de las empresas afirman no esperar un cambio en los precios de los productos o servicios, pero más del 25% aseguró lo contrario, especialmente entre las compañías que trabajan en la industria de la construcción.