El primer ministro Benjamín Netanyahu informó que Israel cerrará la mayoría de los centros comerciales, restaurantes, cafeterías y sitios de entretenimiento durante al menos cinco semanas como parte de las medidas para contener el brote de coronavirus.
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Netanyahu suspendió casi toda la actividad comercial. Sólo funcionará lo "esencial"
(Oficina del Primer Ministro de Israel)
La medida, que esencialmente detiene la mayor parte de la actividad comercial del país, fue anunciada por Netanyahu en una conferencia de prensa especial donde se presentaron una serie de pasos drásticos destinados a combatir la propagación de COVID-19, ya que el número de casos de coronavirus en Israel se acerca a 200.
En la conferencia de prensa se comunicó que las excepciones a la prohibición incluirían los servicios esenciales como supermercados, farmacias y estaciones de servicio.
"El enemigo es invisible y queremos localizarlo", manifestó. "En primer lugar, tenemos que identificar a los enfermos y estamos utilizando todo lo que está a nuestra disposición, incluidos aquellos medios digitales de alta tecnología que tenemos para luchar contra el terrorismo", agregó.
La medida ayudaría a rastrear una posible propagación de la enfermedad sin que el Ministerio de Salud tenga que realizar investigaciones epidemiológicas, las cuales no siempre son precisas.
El primer ministro también sostuvo que cualquiera que no esté obligado a estar físicamente en el lugar de trabajo se quede en su hogar. También comentó que en caso de que las personas necesiten salir de su casa, mantengan una distancia de al menos 2 metros con los demás.
Siegal Sadetzki, jefe de la Unidad de Epidemiología de Cáncer y Radiación del Instituto Gertner, también habló en la conferencia de prensa y manifestó que la directiva para limitar las reuniones públicas se ha endurecido.
"Pedimos que no haya más de diez personas en un mismo espacio, y que mantengan 2 metros de distancia entre sí”, comunicó.
Además, también se anunció el funcionamiento limitado de varios medios de transporte público y se instó al público a pensar dos veces antes de usarlos. Sin embargo, hasta ahora no hay límite en el número de pasajeros permitidos en autobuses o trenes.
El gobierno anunció por último que el cierre del sector educativo, que hasta ahora incluía escuelas y universidades, se extenderá a jardines de infantes, educación especial y escuelas de internado.
