El primer ministro Benjamín Netanyahu analizó la situación en el Mando Sur junto con el ministro de Defensa Naftali Bennett, el jefe de Estado Mayor Aviv Kochavi, el jefe del Shin Bet Nadav Argaman, y varios funcionarios.
Al final de las discusiones, Netanyahu afirmó: “Estamos en medio de una operación y esperamos que sea lo más corta posible. No estamos escalando, pero haremos todo lo necesario para restaurar la paz y la seguridad para los israelíes. Pondremos en la mira a todos los que quieran dañarnos. Ahora saben que podemos llegar a ellos, hasta dónde se escondan”.
“Hay que privarlos de la sensación de que pueden actuar contra nosotros y nuestros ciudadanos, mientras ellos se esconden detrás de los suyos. Cambiamos la ecuación, ahora todos pueden ser un blanco. Es un cambio muy importante, y fortalece en la gran medida la capacidad de disuasión de Israel”, agregó.
El ministro de Defensa Bennett afirmó que “los logros son buenos. El arquitecto del terrorismo de la Yihad Islámica, y hay disuasión, pero el camino que nos espera es largo”.
“Estamos enviando un mensaje claro a nuestros enemigos en todos los frentes de que cualquiera que intente dañar a Israel jamás estará a salvo”, agregó.
Por su parte, el jefe de las FDI, Aviv Kochavi, afirmó que Israel continuaría llevando a cabo eliminaciones selectivas.