El ministro de Finanzas, Avigdor Liberman, se unió el martes al llamado para descartar el Pase Verde, ya que la rápida propagación de la variante Ómicron de coronavirus lo vuelve obsoleto.
“No hay una lógica médica o epidemiológica detrás del Pase Verde, y muchos expertos están de acuerdo”, tuiteó.
"Lo que hay es una interrupción directa de la economía, la vida diaria y una creciente histeria pública. Trabajo con todas las partes involucradas para acabar con el Pase Verde y llevar la normalidad a nuestra vida diaria".
El propio Liberman contrajo coronavirus durante el fin de semana, cinco días después de recibir su cuarta dosis de la vacuna contra el patógeno. El hombre de 63 años dijo que se sentía bien y que pasaría la cuarentena en su casa en Nokdim.
“No hay una lógica médica o epidemiológica detrás del Pase Verde"
Avigdor Liberman, ministro de Finanzas
Israel lanzó por primera vez el Pase Verde el año pasado, un documento que permite a las personas vacunadas con esquema completo o recuperadas de la enfermedad ingresar a lugares públicos.
La publicación del ministro, presidente del partido Israel Beitenu, se produce cuando los funcionarios del Ministerio de Salud deliberan si derogar el requisito del Pase Verde y permitir que aquellos que no están completamente vacunados ingresen a lugares y eventos públicos.
La idea de revocar el documento se reforzó el lunes después de que un estudio israelí mostró que incluso la cuarta dosis ofrecía solo una protección limitada contra Ómicron.
Los resultados preliminares del estudio realizado en el Centro Médico Sheba mostraron que después de recibir la cuarta dosis, los participantes desarrollaron niveles más altos de anticuerpos contra el coronavirus, que solo fueron parcialmente efectivos para prevenir las infecciones por Ómicron.
"El aumento observado en el nivel de anticuerpos después de la administración de la cuarta dosis de Moderna o Pfizer es ligeramente superior al nivel máximo observado después de la administración de la tercera dosis", señaló la directora del estudio, la profesora Gili Regev-Yochay.
"Sin embargo, al usar los datos exclusivos de Sheba sobre la morbilidad de Ómicron entre el personal del hospital que participa en la investigación serológica, vemos que, a pesar del aumento significativo de anticuerpos después de la cuarta inyección, esta protección solo es parcialmente efectiva contra la variante de Ómicron, que es relativamente resistente a la vacuna", agregó.
A principios de este mes, Israel se convirtió en el primer país del mundo en aprobar la cuarta vacuna contra el coronavirus para personas mayores de 60 años y para trabajadores de la salud en un intento por evitar la propagación de la nueva variante.
La profesora Regev-Yochay dijo que creía que era la decisión correcta ofrecer la dosis adicional a los ciudadanos mayores, pero sugirió esperar hasta que esté disponible una vacuna diseñada especialmente para Ómicron antes de administrarla al resto de la población.