Una investigación policial preliminar sobre la peligrosa y confusa fuga de seis terroristas palestinos que lograron escapar de un centro de alta seguridad en el norte de Israel, reveló una serie de errores cometidos por los funcionarios de la prisión.
La impactante fuga de la prisión provocó que las autoridades israelíes lanzaran una masiva persecución en el norte del país y en Cisjordania a primera hora del lunes, después de que seis presos -todos ellos encarcelados por graves delitos de terrorismo- hicieran un túnel para salir de su celda y se escaparan de la prisión de Gilboa, en la mayor fuga de este tipo en décadas.
La fuga supone un embarazoso fallo de seguridad justo antes de Rosh HaShaná, el año Nuevo judío, cuando miles de israelíes viajan al norte para disfrutar de las playas, los campamentos y el Mar de Galilea durante los feriados. Los presos parecen haberse escondido y no hay indicios de que las autoridades israelíes los consideren una amenaza inmediata.
La investigación preliminar reveló que el túnel había sido excavado muy cerca de la torre de vigilancia de la prisión. Ahora se está examinando si el guardia que estaba de turno durante la fuga se había quedado dormido, una sugerencia a la que el Servicio Penitenciario de Israel no respondió oficialmente.
Además, se supo que hubo avisos de los servicios de inteligencia sobre tres de los presos antes de la fuga, lo que sugiere que estaban planeando huir. Según la evaluación policial, algunos de los sospechosos podrían haber huido del país, mientras que otros podrían estar en el valle de Beit She'an, en el norte de Israel. Por ello, se reforzaron las patrullas policiales en torno a las sinagogas de la zona.
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La policía en un puesto de control que se estableció tras la fuga.
(Policía de Israel)
Una fuente del Servicio de Prisiones aseveró que se están preparando para la posibilidad de que el personal de las prisiones de todo Israel sea atacado y se produzcan disturbios.
Los funcionarios de seguridad explicaron que erigieron controles de carretera y están realizando rastrillajes en la zona. Galei Tzahal, la radio del ejército israelí, aseguró que 400 prisioneros están siendo trasladados como medida de prevención contra cualquier intento de fuga adicional.
Esta es la mayor fuga de palestinos de una prisión israelí desde 1987, cuando seis militantes del grupo de la Yihad Islámica se fugaron de una prisión fuertemente vigilada en Gaza, meses antes del estallido de la primera intifada palestina contra Israel.
Se sospecha que los fugados se dirigieron a su ciudad natal, Jenin, en Cisjordania, a unos 25 kilómetros de la cárcel. La Autoridad Palestina ejerce poco control en la ciudad, donde los militantes se enfrentaron en las últimas semanas a las fuerzas israelíes. El lunes por la mañana se vieron helicópteros israelíes sobrevolando la zona.
