El 53° Día de Jerusalem por la liberación y la unión de la ciudad capital, que tendrá lugar este viernes, será celebrado con una serie de eventos pero en un formato limitado y sin algunos de sus actos tradicionales debido a la epidemia de coronavirus.
Una reunión especial entre los miembros del gobierno que se lleva a cabo cada año en un sitio histórico distinto de la ciudad, este año fue reprogramada. En los últimos años, el gobierno se reunió en el museo de las Tierras de la Biblia, en los túneles del Muro de los Lamentos, en el Museo de Israel y en la Colina de las Municiones, entre otros. Esta vez, el evento fue pospuesto para el domingo.
Las ceremonias oficiales en recordación de los judíos etíopes que murieron en su camino a Israel y de los soldados caídos durante la Guerra de los Seis Días en el Monte Herzl, se llevarán a cabo sin una gran concentración de público.
Otro evento central suspendido debido al coronavirus es la ceremonia Yekirei Yerushalaim, en la que se distingue a 12 residentes por su aporte a la ciudad, y que suele celebrarse en el museo Torre de David.
El tradicional desfile de banderas, que atrae a miles de jóvenes de todo el país, que caminan desde el centro de la ciudad hasta el Muro de los Lamentos, también tuvo que ser adaptado este año. Los organizadores decidieron que sería imposible llevar a cabo el evento, razón por la cual organizaron una cadena humana para abrazar a Jerusalem: 3.000 personas, a dos metros una de la otra, planean rodear la Ciudad Vieja de la capital israelí.
Sin embargo, la policía no autorizó la realización del evento e impuso un límite de 450 personas para cada celebración. Los organizadores recurrieron a la Corte Suprema de Justicia, que deberá decidir ahora sobre el formato en que deberá llevarse a cabo el acontecimiento.