Horas antes del comienzo del Día del Perdón, el presidente de Israel, Reuven Rivlin, expresó sus disculpas por “no hacer lo suficiente" por los israelíes que perdieron la vida este año por el COVID-19.
Israel enfrentó en los últimos meses una segunda ola de propagación del coronavirus y el aumento en los casos no muestra signos de desaceleración. Hoy (domingo) por la mañana el país registraba un total de 1.450 fallecidos a causa de la pandemia.
En un mensaje especial al público israelí en honor al día más sagrado del año en el calendario judío, el presidente dijo que dedicará una oración y encenderá una vela en memoria de las víctimas.
“La pandemia y sus víctimas me han hecho pensar en los que perdieron la vida, en el ángel invisible de la muerte que hace su terrible labor de llevarse vidas en salas de emergencia aisladas sin que estén allí las familias para dar un último saludo, una mano apretada, una caricia en el rostro”, expresó Rivlin.
"Recordemos a los pioneros y fundadores, sobrevivientes del Holocausto, inmigrantes veteranos, luchadores y creadores, estudiantes de la Torá y adoradores del Señor, judíos y árabes, ancianos y jóvenes", agregó.
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Sala de atención por coronavirus instalada en el estacionamiento subterráneo del hospital Rambam.
(AFP)
El presidente parece haber dirigido también parte de su discurso contra el gobierno y su manejo de la pandemia al afirmar que reza “a nuestro Padre, nuestro Rey” para que les dé a los líderes israelíes "la comprensión y la fuerza para llevarnos hacia la paz".
Hizo un llamado a los israelíes y judíos de todo el mundo para encender velas en conmemoración de las más de mil víctimas israelíes del coronavirus. "Que las almas de nuestros hermanos y hermanas, las víctimas de la pandemia, estén atadas al vínculo de la vida, y que digamos Amén", concluyó Rivlin.
