El Tribunal de Distrito de Jerusalem dictaminó este lunes que el grupo terrorista Hamás, con sede central en la Franja de Gaza, debe pagar 38 millones de NIS (11,8 millones de dólares) a las familias de tres adolescentes secuestrados y asesinados en Cisjordania en junio de 2014.
El tribunal ordenó a la organización islamista y a Hussam Qawasmeh, un palestino de la ciudad cisjordana de Hebrón -condenado por orquestar el ataque-, a indemnizar a las familias de Gilad Shaar, Eyal Yifrach y Naftali Fraenkel.
"La sentencia no es suficiente, porque el Estado de Israel debe castigar el terrorismo con la mayor dureza posible"
Uri Yifrach, padre de Eyal
Los tres adolescentes fueron secuestrados y asesinados mientras hacían autostop en Cisjordania y las familias de las víctimas solicitaron inicialmente una indemnización de 520 millones de NIS (162 millones de dólares), alegando el tremendo daño que les causó la búsqueda de sus seres queridos, que duró dos semanas y media.
Las familias ganaron el caso por incomparecencia ante la ausencia de defensa de los acusados de Hamás, señalando que la cuantía de los daños punitivos se basa en una sentencia anterior del Tribunal Supremo que redujo significativamente los importes de los daños en demandas por terrorismo.
Los representantes de las familias de los adolescentes asesinados expresaron su descontento con la sentencia y afirmaron que no disuadirá a futuros terroristas de llevar a cabo actos similares. "La sentencia no es suficiente, porque el Estado de Israel debe castigar el terrorismo con la mayor dureza posible", aseguró el padre de Eyal Yifrach, Uri.
"Esta es una suma que no disuadirá a Hamás y a grupos similares, que continúan con sus actividades en todo momento. Nuestro objetivo es socavar las herramientas económicas y legales de las organizaciones terroristas, para darles una lección y, si Dios quiere, evitar el próximo incidente", subrayó.
"Esta es una suma que no disuadirá a Hamás y a grupos similares, que continúan con sus actividades en todo momento. Nuestro objetivo es socavar las herramientas económicas y legales de las organizaciones terroristas, para darles una lección.
Uri Yifrach, padre de Eyal
"Una organización que se basa en un presupuesto de mil millones de dólares no se verá disuadida por ninguna demanda de 10 millones de dólares. El objetivo de las demandas es acabar con el terrorismo, y esto no puede hacerse con sumas tan insignificantes para ellos", expresó por su parte Nitsana Darshan-Leitner, activista de derechos humanos y fundadora de la organización israelí de defensa de la ley Shurat Hadin, que representa a las familias.
"Es impensable que un tribunal israelí se muestre tan clemente con la organización terrorista que financió, planificó y llevó a cabo el horrible atentado que toda la nación sigue llevando en su corazón".
Las familias de las víctimas informaron que apelarán el veredicto ante el Tribunal Supremo en un intento de detener el flujo de financiación de la Autoridad Palestina (AP) a Hamás.
"Una organización que se basa en un presupuesto de mil millones de dólares no se verá disuadida por una demanda de 10 millones"
Nitsana Darshan-Leitner, defensa de las familias
La demanda indicaba que Israel podía deducir la indemnización de los ingresos fiscales embargados que Israel recauda en nombre de la AP. Se estima que Israel retuvo más de 600 millones de NIS en impuestos palestinos en un intento de desincentivar a la AP para que pague estipendios a los palestinos heridos o muertos en enfrentamientos con las fuerzas israelíes, incluidos los terroristas declarados y sus familias.
