Horas antes de la presentación oficial del plan de paz para el Medio Oriente en Washington, el primer ministro, Benjamín Netanyahu, intentó recibir el apoyo de los líderes de los asentamientos en Cisjordania, que acompañan al mandatario israelí en Estados Unidos.
Netanyahu mantuvo un encuentro con líderes del Consejo de Yesha (asentamientos en Cisjordania), entre los que se encontraban David Eljayani, del Consejo del Valle del Jordán; Oded Ravivi, de Efrat; Israel Gantz, de Biniamín, y Shlomo Neeman, de Gush Etzion. La esposa del primer ministro, Sara Netanyahu, también estuvo presente en la reunión.
Los tres líderes de los asentamientos le manifestaron su apoyo a Netanyahu. “Vinimos para darle fuerzas al primer ministro y expresar la voz de todos los asentamientos ante la Casa Blanca de un modo claro y contundente”. Y agregaron: “Era muy importante para nosotros escuchar de cerca lo que tienen para decirnos y no dejarnos llevar por rumores. Le indicamos a Netanyahu cuáles los asuntos de vital importancia para los asentamientos y para todo el país: la soberanía israelí y el desarrollo y la prosperidad de los poblados judíos en Judea y Samaria”.
Después de la reunión, Netanyahu mantuvo un encuentro con el presidente del Consejo de Samaria, Yosi Dagán, quien le manifestó al primer ministro sus preocupaciones respecto del plan de Trump.
El dirigente le expresó su oposición al establecimiento de un Estado palestino, a la transferencia del Área C y B y otros sectores de Cisjordania a la Autoridad Palestina, y al congelamiento de la planificación y la construcción de asentamientos, entre otras.
El primer ministro le describió a Dagán partes del plan de Trump, y le manifestó que los asentamientos en Judea y Samaria son una de sus prioridades y que trabaja para desarrollarlos y expandirlos.
“El primer ministro me explicó detalles del plan y señaló que el bien de Israel y de los asentamientos es su prioridad”, sostuvo Dagán. Y añadió: “Estamos en Washington para fortalecer a Netanyahu y al presidente Trump para aplicar la soberanía en los asentamientos judíos en Judea y Samaria, y para que no se lleven a cabo medidas que puedan poner en peligro la existencia del Estado de Israel y los asentamientos”.
La principal preocupación de los líderes de los asentamientos es el potencial establecimiento de un Estado palestino. En su intento por recibir el apoyo de los referentes de los poblados judíos en Cisjordania, Netanyahu les explicó a los dirigentes que la creación de un Estado palestino “no es lo que parece”.
Sin embargo, según la prensa estadounidense, el denominado Acuerdo del Siglo propone un intercambio de territorios entre Israel y la Autoridad Palestina, por lo que los palestinos controlarían entre un 70% y un 80% de los territorios de Cisjordania.
De acuerdo con informes de los medios de comunicación de Estados Unidos, a pesar de que los palestinos no están de acuerdo con el intercambio de territorios, el plan no impide la creación de un Estado palestino.