El gobierno israelí aprobó el miércoles por unanimidad una prohibición de todas las hogueras que tradicionalmente encienden durante las festividades de Lag BaOmer para evitar reuniones que podrían conducir a otro aumento masivo de las infecciones por coronavirus.
La fiesta judía cae el día 18 del mes de Iyar en el calendario hebreo, en el trigésimo tercer día de la cuenta del Omer; este año se celebrará en la tarde del 11 de mayo y finalizará el 12 de mayo.
En una reunión telefónica, los ministros decidieron adoptar la posición del Ministerio de Salud sobre el tema, así como la del Consejo de Seguridad Nacional y el Servicio de Bomberos y Rescate.
Llamaron a prohibir todas las hogueras en las residencias privadas, además de los espacios públicos, ya que puede hacer que los vecinos se reúnan y provoquen una multitud de incendios en las casas que podrían abrumar los servicios de extinción de incendios.
El procurador general Avichai Mandelblit manifestó que aprobaría la prohibición a pesar de afirmar anteriormente que tal medida podría implicar grandes dificultades legales.
El gobierno también evitará que los peregrinos visiten la tumba del rabino Shimon bar Yochai, un sabio líder del siglo II, en la ciudad norteña de Meron, para el aniversario de su muerte, que tiene lugar en la misma fecha.
El Monte Meron y el área circundante estarán cerrados, excepto para los residentes locales o las personas cuyos lugares de trabajo se encuentran en el área.
Las nuevas restricciones entrarán en vigencia el jueves 7 de mayo y vencerán el próximo miércoles 13 de mayo.
El Consejo de Seguridad Nacional aconsejó al gobierno el lunes que imponga un bloqueo nacional durante Lag BaOmer, pero la propuesta se topó con la vociferante oposición del ministro del Interior, Aryeh Deri, y el ministro de Seguridad Pública, Gilad Erdan.
El mismo día, los oficiales de policía presentaron la complejidad y los inminentes peligros al permitir que los peregrinos visiten el Monte Meron durante Lag Baomer, ya que el evento atrae a cientos de miles de fieles cada año.
El evento requiere grandes preparaciones a nivel nacional durante todo el año, trabajos de infraestructura en las afueras de la montaña que son imposibles bajo las restricciones actuales de coronavirus.
