Acusados en reiteradas oportunidades de no respetar los derechos humanos de sus ciudadanos, representantes políticos de Irán y China se manifestaron en redes sociales por los disturbios que ocurren en los últimos días en Estados Unidos.
Originados a partir de la muerte de George Floyd, un ciudadano de origen afroamericano que fue estrangulado por un policía, las marchas tienen repercusión mundial y fueron aprovechadas por dos de los principales adversarios de Estados Unidos en el planeta.
Javad Zarif, ministro de Relaciones Exteriores iraní, realizó un llamado global para “luchar contra” el racismo y utilizó el recurso de la ironía para atacar a la administración de Washington: difundió un antiguo comunicado firmado por Mike Pompeo, secretario de Estado de EE.UU, que expresaba su preocupación por unas protestas en Irán, aunque con algunas modificaciones sustanciales.
En la versión publicada por Zarif se reemplazaban palabras clave para invertir la carga de los argumentos: “Irán” por “EE.UU.” y “corrupción” por “racismo”, entre otros conceptos, y la firma de Pompeo fue reemplazada por la del propio ministro iraní. Ante esta comparación el funcionario estadounidense respondió: “Ustedes cuelgan homosexuales, agreden a mujeres y asesinan a judíos.”
En China ocurrió una situación similar: Hua Chunying, vocera del Ministerio de Relaciones Exteriores, recordó un comunicado en el que su país era fuertemente criticado por Estados Unidos tras una serie de violentas protestas en Hong Kong. “No puedo respirar”, fue la sugestiva frase que acompañaba la imagen, en referencia a las últimas palabras de George Floyd y al lema de las protestas que ocurren en diferentes puntos de Estados Unidos.
(Foto principal y de lado Zarif rie: "Javad Zarif, ministro de Relaciones Exteriores de Irán.") (Crédito: Reuters)