Irán registró 2.751 contagios de COVID-19 en las últimas 24 horas, el peor balance diario en los últimos dos meses, anunció el martes el Ministerio del Interior.
"En las últimas 24 horas, se detectaron 2.751 casos y 212 muertos", indicó la portavoz del Ministerio de Salud, Sima Sadat Lari.
El número de fallecidos e infectados sigue una curva ascendente en Irán desde mayo, lo que obligó a las autoridades a establecer la obligatoriedad del uso de mascarillas en espacios cerrados, además de otras restricciones.
Pero algunos iraníes continúan sin utilizarlas en tiendas y bancos, un comportamiento criticado por la cadena de televisión estatal.
El ministro adjunto de Salud, Iraj Harirchi, pidió que se multara a quienes no respeten el uso de mascarillas, exceptuando aquellos "que no tengan los medios para comprarlas", en declaraciones citadas por la agencia de prensa ISNA.
Según el último balance, el nuevo coronavirus provocó 17.600 muertos y 315.000 infectados en Irán, siendo el país más afectado en Oriente Próximo.
Teherán adoptó varias restricciones para frenar la pandemia, pero nunca impuso un confinamiento generalizado.
