Pakistán negó este domingo los rumores de comercio con Israel a raíz del tuit de un empresario judío en el que afirmaba haber exportado con éxito muestras de alimentos a Jerusalem y Haifa.
Fishel Benkhald, un judío paquistaní afincado en la ciudad portuaria de Karachi, en el sur del país, se hizo viral por tuitear sobre su primer envío de alimentos kosher a Israel.
Ambos países no mantienen relaciones diplomáticas.
"Felicidades a mí como pakistaní. He exportado el primer lote de productos alimentarios pakistaníes al mercado israelí", escribió la semana pasada.
Benkhald compartió un vídeo en el que se ve su visita a un mercado israelí. Pasa junto a puestos con contenedores de dátiles, frutos secos y especias con etiquetas de productos en hebreo.
Pakistán negó tener relaciones diplomáticas o comerciales con Israel. "No hay ningún cambio de política", declaró a los medios de comunicación Mumtaz Zahra Baloch, portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, en respuesta a preguntas sobre el comercio bilateral.
Además, el Ministerio de Comercio de Pakistán comentó que los rumores sobre comercio bilateral eran "pura propaganda".
"No tenemos relaciones comerciales con Israel ni tenemos intención de desarrollarlas", afirmó en un comunicado.
Benkhald, que forma parte de una menguante comunidad judía en la nación de mayoría musulmana de 220 millones de habitantes, se convirtió con éxito al Islam desde el judaísmo en 2017.
Aunque una declaración en su pasaporte paquistaní dice que el documento es válido para viajar a todos los países excepto Israel, es el primero de este país que viajó oficialmente una peregrinación con el permiso de Islamabad.
"La comida, el comercio, la música y el turismo unen a la gente. Construyamos puentes", sostuvo Benkhald en su tuit.
Benkhald envió muestras de alimentos a tres empresarios de Jerusalem y Haifa a través de los Emiratos Árabes Unidos, donde se reunió con ellos en exposiciones de alimentos, según el Ministerio de Comercio.
El ministerio dijo que el envío no contaba con el apoyo del gobierno pakistaní y que no había ningún canal bancario u oficial implicado.
El Congreso Judío Estadounidense acogió con satisfacción la noticia del envío, afirmando que podría tener implicaciones más amplias para las economías de los dos países y para la región en general.
Pero en Pakistán hay opiniones encontradas sobre la aventura de Benkhald. Shireen Mazari, dirigente clave del partido del ex primer ministro Imran Khan y ex ministra de Derechos Humanos, criticó al gobierno y preguntó cómo un ciudadano pakistaní exportaba directamente a Israel.
Sin embargo, un representante interreligioso de la actual administración, Tahir Mehmood Ashrafi, afirmó que a Benkhald se le permitió visitar Israel durante el mandato de Khan.