Por iniciativa del movimiento Hezbollah, y eludiendo las sanciones de Estados Unidos, este jueves decenas de camiones con combustible iraní cruzaron la frontera de Siria hacia el Líbano.
En la ciudad fronteriza de Al Ain, partidarios de la organización terrorista dieron la bienvenida al convoy de combustible con mujeres arrojando flores a los camiones, y hombres armados que disparaban al aire en señal de alegría.
Los camiones ingresaron al Líbano en medio de una crisis económica sin precedentes y una grave escasez de combustible. Hezbollah lideró este abastecimiento del régimen iraní, padrino de la organización libanesa, y así se adjudicó un logro político importante en medio de una situación angustiante en el país.
El envío viola una sanción impuesta por Estados Unidos contra la comercialización de combustible desde Teherán. Para evitar que la sanción recaiga sobre el Líbano, el cargamento pasó primero por el puerto de Banias, en el oeste de Siria, y desde allí fue transportado en camiones hasta territorio libanés.
A fines de agosto Hassan Nasrallah, secretario general de Hezbollah, anunció que un petrolero iraní abastecería al Líbano y advirtió a Israel y Estados Unidos para que no interfirieran en la operación.
La agencia AP informó que 60 camiones, con 50 mil litros de combustible cada uno, cruzaron la frontera desde la ciudad siria de Al Quseir y que otro convoy similar arribará mañana. Según la red libanesa Al Mayadeen, cercana a Hezbollah, llegaron aproximadamente 104 camiones desde Siria y el combustible se almacenará en la localidad de Baalbek.
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Disparos al aire en señal de festejo por la llegada de combustible iraní al Líbano.
(AP)
A pesar de las medidas de seguridad anunciadas y el pedido de Nasrallah para que los residentes locales se abstuvieran de celebrar la llegada de los camiones, la caravana fue recibida con aplausos, ovaciones y carteles de agradecimiento hacia Irán y el presidente sirio Bassar Assad.
“Es algo tremendo y grandioso, rompimos el bloqueo de Estados Unidos y países extranjeros, trabajamos con la ayuda de Alá y nuestra gran madre, Irán”, declaró Nabil Idris, partidaria de Hezbollah que participó de los festejos en Al Ain.
Najib Mikati, el primer ministro del Líbano que la semana pasada anunció la formación de un nuevo gobierno, evitó realizar declaraciones sobre las importaciones de combustible desde Irán. Desde el gobierno dijeron que no habían ordenado importar combustible, y una fuente de seguridad libanesa afirmó que los camiones cruzaron desde Siria a través de un paso fronterizo no oficial.
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Gigantografías de Nasrallah, líder de Hezbollah; Assad, presidente de Siria; y Khamenei, líder supremo de Irán.
(AP)
