Los líderes mundiales comenzaron a llegar a los Emiratos Árabes Unidos el domingo para ofrecer sus condolencias por la muerte del presidente Khalifa bin Zayed al-Nahyan, quien fue sucedido por su medio hermano y líder de facto, el jeque Mohammed bin Zayed.
El presidente Issac Herzog, en representación de Israel, con el que los Emiratos Árabes Unidos forjaron lazos hace dos años en un importante realineamiento de Oriente Medio, también se hará presente el domingo, al igual que el presidente palestino y el primer ministro británico.
El jeque Mohammed, fue hasta ahora gobernante de Abu Dabi: un aliado de occidente, productor de petróleo de la OPEP e importante centro comercial regional. El sábado fue elegido por un consejo supremo federal como el tercer presidente de los Emiratos Árabes Unidos.
El presidente francés, Emmanuel Macron, cuyo país tiene lucrativos negocios y lazos militares con los Emiratos, llegó a Abu Dhabi y en una publicación de Twitter rindió homenaje a los "valores de paz, apertura y diálogo" del jeque Khalifa.
El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, cuya administración ha tenido vínculos tensos con los Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita, estará representado por la vicepresidenta Kamala Harris, que realizará una visita el lunes.
Varios líderes árabes, incluido el rey de Jordania y el presidente de Egipto, presentaron sus respetos el sábado. El príncipe heredero de Arabia Saudita, cuyo padre, el rey Salman, ingresó al hospital hace una semana, envió una delegación.
El jeque Mohammed ha sido una fuerza impulsora en la política de Medio Oriente, defendiendo al príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman en Occidente cuando ascendió al poder y combatiendo el Islam político, visto como una amenaza para el gobierno dinástico del Golfo, en toda la región.
Mohammed profundizó los lazos con Rusia y China a medida que los estados del Golfo cuestionaban cada vez más el compromiso regional del garante tradicional de seguridad, Estados Unidos. Las tensiones entre Estados Unidos y los Emiratos Árabes Unidos se pusieron de relieve en el conflicto de Ucrania, cuando los estados del Golfo se negaron a formar parte del aislamiento de Rusia.