Un alto funcionario de inteligencia de Estados Unidos afirmó que Israel llevó a cabo ataques aéreos en Siria durante la madrugada de hoy (miércoles) utilizando inteligencia proporcionada por Estados Unidos, en una inusual cooperación entre los dos países para determinar los objetivos a golpear en Siria.
Al menos 57 personas, entre soldados sirios y milicianos proiraníes, murieron en los bombardeos atribuidos a Israel, considerados los ataques más letales desde 2018.
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El jefe del Mossad, Yossi Cohen (izquierda), y el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, durante una reunión celebrada el año pasado en la Casa Blanca.
(AFP)
El funcionario dijo que los bombardeos tuvieron como objetivo una serie de depósitos para almacenar y montar armas iraníes.
La fuente señaló que los depósitos también servían para almacenar componentes utilizados para el programa nuclear de Irán.
El funcionario estadounidense, que solicitó el anonimato para hablar sobre asuntos delicados de seguridad nacional, sostuvo que el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, discutió el ataque aéreo con el jefe del Mossad, Yossi Cohen, en una reunión llevada a cabo abiertamente en el popular restaurante Café Milano de Washington el lunes.
La aviación israelí realizó al menos 18 incursiones contra objetivos en los alrededores de la ciudad de Deir Ezzor y en los desiertos de Bukamal y Mayadin, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).
Estos ataques mataron a al menos 14 soldados del ejército sirio y 43 combatientes extranjeros vinculados con milicias proiraníes, según el nuevo balance que dio a la AFP el director del OSDH, Rami Abdel Rahman, que no pudo precisar las nacionalidades de las víctimas.
Los paramilitares pertenecen al movimiento terrorista libanés Hezbollah y a las Brigadas de los Fatimides, que cuentan con combatientes afganos proiraníes, que operan en la región, según el OSDH.
Ya el martes, aviones no identificados habían efectuado varios bombardeos en la región de Bukamal, matando a 12 combatientes de milicias pro-Irán, según la ONG.
Por el momento, el ejército israelí no hizo ningún comentario sobre los hechos.
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31 combatientes pro-iraníes y al menos nueve soldados sirios murieron en los bombardeos.
Los más "mortíferos"
Según el director del OSDH, Rami Abdul Rahman, se trata de los ataques israelíes "más mortíferos desde junio de 2018", cuando bombardeos en esta misma región mataron a al menos 55 combatientes progubernamentales, entre ellos iraquíes y sirios.
En noviembre, ataques similares en el este de Siria causaron al menos 19 muertos entre las milicias pro-Irán, según la ONG.
Por su lado, la agencia oficial siria SANA informó de bombardeos israelíes nocturnos en el este sin ofrecer más detalles. "Durante la madrugada del miércoles, el enemigo israelí realizó una agresión aérea contra la ciudad de Deir Ezzor y la región de Abu Kamal", informó el medio, que cita una fuente militar.
"Actualmente estamos determinando las consecuencias de la agresión", añadió.
Se trata de la segunda tanda de bombardeos en menos de una semana que realiza Israel en Siria.
Los últimos fueron efectuados el 7 de enero y tuvieron como objetivo posiciones en el sur del país y al sur de Damasco, la capital, en los que murieron tres combatientes proiraníes.
En 2020, Israel bombardeó medio centenar de objetivos en Siria, según un informe anual que publicó a finales de diciembre el ejército israelí.
Desde el inicio de la guerra en Siria en 2011, Israel ha realizado centenares de bombardeos contra las tropas gubernamentales, las fuerzas aliadas iraníes y los terroristas de Hezbollah.
Estos bombardeos representan una "política clara" de Israel, declaró en noviembre el primer ministro del país, Benjamín Netanyahu.
Las autoridades israelíes están preocupadas por la presencia a sus puertas de fuerzas iraníes ya que la República Islámica es uno de sus peores enemigos.
La guerra en Siria ha causado más de 380.000 muertos y forzado a millones de personas a abandonar sus hogares.
