En vísperas del 40º aniversario de la toma de rehenes en la embajada estadounidense en Teherán, estos han sido los mojones del vínculo entre ambos Estados:
El retorno del Sah
En agosto de 1953, el Reino Unido y Estados Unidos organizaron un golpe de Estado contra el primer ministro de Irán, Mohammad Mossadegh, que había nacionalizado la compañía petrolera previamente controlada por los británicos.
El golpe permitió el retorno a Teherán del sah Mohammad Reza Pahlavi, obligado a refugiarse brevemente a Europa debido a desacuerdos con Mossadegh, quien buscaba limitar sus poderes.
Con el sah nuevamente en el poder, Irán se convirtió en uno de los principales clientes de la industria de defensa estadounidense y en un baluarte contra la influencia soviética.
A finales de la década de 1950, se establecieron las bases del programa nuclear iraní, bajo los auspicios de los Estados Unidos y en el marco de acuerdos bilaterales con el sah. En 1957 se firmó un programa nuclear de cooperación civil con Estados Unidos.
La ruptura
En enero de 1979, después de meses de intensas protestas contra su régimen, el sah huyó, inicialmente hacia Egipto, y el 1 de febrero el ayatolá Ruhollah Jomeini regresó a Teherán después de quince años en el exilio.
El 4 de noviembre de 1979, siete meses después de la proclamación de la República Islámica de Irán, los estudiantes islámicos tomaron por asalto la embajada de Estados Unidos en Teherán, exigiendo la extradición del ex sah, que seguía tratamiento médico en Estados Unidos. 52 personas fueron tomadas rehenes durante 444 días.
En abril de 1980 Estados Unidos rompió las relaciones diplomáticas entre los dos países e impuso un embargo comercial. En noviembre de 1986, las revelaciones de la visita secreta a la capital iraní de un emisario del presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, hizo estallar el caso de la venta de armas de Washington a Teherán (Irangate), con el objetivo de asegurar la liberación de rehenes estadounidenses en el Líbano.
El 3 de julio de 1988, un Airbus de Iranair fue derribado "por error" por un buque de guerra estadounidense sobre el Golfo, matando a 290 personas.
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En el 2018 Trump, anunció la retirada de su país del acuerdo nuclear y posteriormente comunicó el restablecimiento de severas sanciones.
(Ynet)
"Eje del mal"
El 30 de abril de 1995 Estados Unidos anunció un embargo económico total contra Irán por su "búsqueda de armas nucleares", según el presidente Bill Clinton. A esa decisión le siguieron sanciones contra las empresas que invierten en los sectores de petróleo y gas de Irán.
El 29 de enero de 2002 el sucesor de Clinton, George Bush, incluyó a Irán entre los países del "Eje del mal" de apoyo el terrorismo.
En 2005, el presidente iraní Mahmoud Ahmadinejad reinicia el enriquecimiento de uranio en el país.
Acuerdo histórico
En marzo de 2009 el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ofreció "hablar directamente con el pueblo y los líderes de la República Islámica de Irán", pero en junio de ese mismo año condenó la represión a las protestas y expresó su convicción de que la legitimidad de la reelección de Ahmadinejad plantea "serios cuestionamientos".
En junio de 2013, Estados Unidos se declaró "listo para colaborar directamente" con el nuevo presidente, Hassan Rohani, y en septiembre Obama y Rohani mantuvieron un contacto telefónico, el primer diálogo directo entre los dos países desde 1979.
El 14 de julio de 2015 Irán y las principales potencias llegaron a un acuerdo que puso fin a doce años de tensión en torno al problema nuclear iraní.
Con vigencia a partir de 2016, el acuerdo firmado en Viena determinaba un levantamiento gradual y condicional de las sanciones a cambio de garantías de que Teherán no se dotaría de armas nucleares.
Distensión pulverizada
Sin embargo el 8 de mayo de 2018 el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció la retirada unilateral de su país del acuerdo nuclear y posteriormente anunció el restablecimiento de severas sanciones, particularmente contra los sectores petrolero y financiero de Irán.
En mayo de 2019, Teherán comenzó a retirarse de algunas de sus obligaciones en virtud del acuerdo de 2015, en represalia por las draconianas sanciones estadounidenses que sofocan su economía.
La tensión alcanzaron su punto máximo en junio cuando los Guardianes de la Revolución, el ejército ideológico de Teherán, anunciaron que habían derribado un avión no tripulado estadounidense que había "violado" el espacio aéreo de Irán. El Pentágono negó esa acusación.
Trump afirmó incluso haber cancelado a último momento ataques de represalia, para evitar un gran número de víctimas humanas.
En julio, Irán anunció que ahora produce uranio enriquecido al menos a 4,5%, un nivel prohibido por el acuerdo de 2015.
