El primer ministro Benjamín Netanyahu y el líder del partido Kajol Labán, Benny Gantz, acudirán a Washington la próxima semana para la presentación del plan de paz de Medio Oriente elaborado por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump.
Netanyahu recibió la noticia de parte del vicepresidente de la Casa Blanca, Mike Pence, al final del Quinto Foro Internacional del Holocausto.
Por medio de una declaración conjunta, Pence explicó que Netanyahu estaba detrás de la invitación de Benny Gantz a Washington porque quería alcanzar el consenso más amplio posible en las discusiones.
"Acabamos de completar una conversación sobre los planes para la próxima semana", sostuvo Pence luego de reunirse en la embajada de Estados Unidos en Jerusalem.
"El presidente Trump me pidió que extendiera una invitación al primer ministro Netanyahu para que venga a la Casa Blanca la próxima semana a discutir asuntos regionales, así como la perspectiva de paz aquí en Tierra Santa", comentó.
Según informes anteriores, el plan de EE.UU. permite la soberanía israelí sobre el Valle del Jordán y los asentamientos en el Área C. También posibilita un Estado palestino desmilitarizado, que incluiría porciones de espacios deshabitados y palestinos en el Área C.
Un funcionario de Trump en Washington comentó que el plan se presentará en los próximos días, mientras que otro involucrado en el asunto expresó que el plan no se formuló en torno a la posición del presidente palestino Mahmud Abbas.
Se esperaba que el equipo de paz de Estados Unidos, encabezado por el asesor especial Jared Kushner y el enviado especial Avi Berkowitz, visitaran Israel el miércoles y jueves para discutir el plan con Netanyahu y Gantz, pero la visita se canceló en el último minuto debido a las condiciones climáticas severas y un calendario apretado.
El vuelo a la capital estadounidense se llevará a cabo cuando la Knesset comience a debatir la solicitud de Netanyahu de inmunidad judicial por cargos de soborno, fraude y abuso de confianza, pero los funcionarios de Kajol Labán dejaron en claro su posición de que no hay razón para posponer ese procedimiento.
El ministro de Defensa, Naftali Bennett, sostuvo que puede haber riesgos asociados al plan de paz: "El presidente Trump, Jarred Kushner y el embajador Friedman son amigos cercanos de Israel que podrían estar enfrentando una oportunidad histórica, la cual viene acompañada con serios riesgos".
Una declaración emitida en nombre del partido de Bennett, Yamina, mencionó: "No cederemos territorio a los árabes ni permitiremos la fundación de un estado palestino, abordaremos los detalles del plan a medida que salgan a la luz".
Los funcionarios de la organización Peace Now expresaron que "cualquier propuesta que no incluya la formación de un estado palestino de acuerdo con las fronteras de 1967 y la evacuación de asentamientos solitarios es un engaño que terminará en el basurero de la historia".
A principios de 2019, la administración Trump publicó la parte económica del plan en Bahrein. Ni los funcionarios israelíes ni palestinos estuvieron presentes en la presentación.
