Semanas de violentos enfrentamientos en Jerusalén Este han provocado la escalada bélica más intensa en años entre Israel y militantes palestinos en la Franja de Gaza.
En el centro de la violencia que ha dejado decenas de muertos se encuentran las tensiones entre israelíes y palestinos por Jerusalem, ciudad que alberga sitios sagrados tanto para el judaísmo como para el Islam y el cristianismo.
Pero, ¿cuáles fueron los factores que coadyuvaron para desencadenar esta escalada que hoy se vive en Oriente Medio?
Protestas en Ramadán y desalojos en Jerusalem
Desde el comienzo del mes sagrado musulmán, el Ramadán, a mediados de abril, en Jerusalem Oriental los palestinos se han enfrentado todas las noches a la policía israelí, que colocó barreras para detener las reuniones nocturnas en la puerta de Damasco de la Ciudad Vieja amurallada.
Los palestinos interpretaron la colocación de esas barreras como una restricción a su libertad de reunión. La policía informó que sólo estaban allí para mantener el orden.
Las tensiones también fueron en aumento por un caso legal de larga duración que podría terminar con varias familias palestinas desalojadas de sus hogares para dar paso a colonos israelíes que, respaldados por un fallo judicial, quieren mudarse a ese lugar.
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Palestinos celebrando la eliminación de las barricadas de la Puerta de Damasco.
(Reuters )
La violencia se extendió rápidamente al complejo de la Ciudad Vieja donde se encuentra la Mezquita Al-Aqsa, el tercer santuario más sagrado del Islam y el sitio más sensible en el conflicto palestino-israelí. Cientos de palestinos resultaron heridos en enfrentamientos con la policía en el recinto y en los alrededores de la Ciudad Vieja en los últimos días.
"Línea roja"
Los gobernantes islamistas de Gaza, Hamas, y otros grupos militantes en el enclave advirtieron repetidamente a Israel que los combates en Jerusalem eran una "línea roja" que no se podía sobrepasar y prometieron disparar cohetes si la policía israelí no detenía sus redadas en el complejo de Al-Aqsa.
Mientras Israel conmemoraba su captura de Jerusalem Este en una guerra de 1967 con una marcha, Hamas y el grupo militante de la Yihad Islámica dispararon cohetes hacia Jerusalem y otras ciudades.
Israel "prendió fuego en Jerusalem y Al-Aqsa y las llamas se extendieron a Gaza, por lo tanto, es responsable de las consecuencias", dijo el líder de Hamas, Ismail Haniyeh.
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Palestinos chocan con las fuerzas de seguridad israelíes en el complejo de la mezquita de al-Aqsa en la ciudad vieja de Jerusalem.
(AP)
En cuestión de horas, aviones de combate israelíes comenzaron a bombardear objetivos militantes en Gaza, y los militares dijeron que "no se pueden descartar" víctimas civiles en el territorio costero, densamente poblado.
Desde entonces, los combates se han intensificado drásticamente con militantes que dispararon cientos de cohetes hacia Tel Aviv y otras ciudades del centro del país, en tanto Israel llevó a cabo cientos de ataques aéreos sobre Gaza.
La violencia también estalló en ciudades mixtas árabe-judías en todo Israel, con miembros de la minoría árabe del 21% de Israel enojados por los desalojos de Jerusalem y la violencia en Gaza.
Los intereses de Hamás y la política israelí
Los intercambios aéreos más intensos entre Israel y Hamas desde la guerra de 2014 en Gaza han provocado la preocupación internacional de que la situación podría salirse de control.
Pero Hamas también pareció ver la escalada como una oportunidad para marginar al presidente palestino Mahmoud Abbas y presentarse como el guardián de los palestinos en Jerusalem.
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Mahmoud Abbas, presidente de la Autoridad Palestina. Hamás vio la oportunidad de desplazarlo del centro de la escena política palestina.
(AP, UNTV)
Hamas ha acumulado unos 7.000 cohetes, así como 300 misiles antitanques y 100 antiaéreos, desde la guerra de 2014, informó un comandante militar israelí durante una sesión informativa en febrero. La Yihad Islámica ha acumulado 6.000 cohetes, agregó el mismo el comandante. Los grupos no han confirmado ni negado las estimaciones israelíes.
Analistas políticos israelíes señalaron que Hamas también podría ver este momento como oportuno, pues Israel se encuentra en medio de un cambio político, ya que los oponentes del primer ministro Benjamin Netanyahu intentan formar un gobierno que lo destituya después de la cuarta elección realizada el 23 de marzo.
Otros analistas piensan que Netanyahu también sale favorecido, para distraer la atención del juicio por cargos de corrupción que él niega, lo que permitió que las tensiones aumentaran en Jerusalem y se extendieran a Gaza.
Gaza ha tenido durante años acceso limitado al mundo exterior debido a un bloqueo liderado por Israel y apoyado por Egipto, quienes citan preocupaciones de seguridad sobre Hamas.
Jerusalem en el centro del conflicto
La política, la historia y la religión colocan a Jerusalem en el centro del conflicto palestino-israelí más amplio.
En el corazón de la Ciudad Vieja de Jerusalem se encuentra la colina conocida por los judíos de todo el mundo como el Monte del Templo, el sitio más sagrado del judaísmo, y para los musulmanes a nivel internacional como El Noble Santuario. Fue el hogar de los templos judíos de la antigüedad. Dos lugares sagrados musulmanes ahora se encuentran allí, la Cúpula de la Roca y la Mezquita Al-Aqsa.
Los cristianos también reverencian la ciudad como el lugar donde creen que Jesús predicó, murió y resucitó.
Israel ve a toda Jerusalem como su capital eterna e indivisible, mientras que los palestinos quieren la sección oriental como capital de un futuro estado futuro. No obstante, la anexión de Jerusalem Oriental por parte de Israel no está reconocida internacionalmente.
