Sara Eyal dedicó toda su vida a tomar fotos clasificadas para las agencias de inteligencia de Israel, que nadie más que los operarios de las salas de archivo han visto. Ahora, años después de la muerte de Eyal, se exhibirán docenas de fotografías nunca antes vistas de su colección personal en una exposición especial en Jerusalem.
La exposición, titulada "Emergiendo de las sombras", mostrará las imágenes que capturó de los paisajes y el pueblo de Israel cuando el país estaba recién en pañales, en los años 50 y 60.
Las fotografías, almacenadas durante muchos años en cajas de la casa familiar de la mujer en Tel Aviv, tienen un poco de su estilo clandestino único, que la convirtió en una fotógrafa de espionaje tan exitosa, a pesar de ser tomadas para su colección personal.
Eyal vivió una vida única.
La ex agente del Mossad nació en 1915 en Eslovaquia y huyó a Palestina en 1940, luego de casarse con un hombre llamado Zvi Salter. Aunque la mudanza la salvó de los horrores del Holocausto, toda su familia murió en el genocidio nazi.
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Santa Catalina, una ciudad en el sur del Sinaí que una vez estuvo bajo control israelí
(Sara Eyal)
El matrimonio no duró mucho y se quedó completamente sola con un niño pequeño.
La terrible situación no rompió el espíritu de la mujer y en su lugar comenzó a estudiar fotografía y en 1952 comenzó a trabajar para los servicios de inteligencia israelíes.
Como parte de su trabajo en el Mossad, Eyal vivió en París durante seis años, de 1953 a 1959, donde conoció a uno de sus mejores amigos, el Dr. Meir Rosenne, quien dio forma al histórico acuerdo de paz entre Israel y Egipto.
Algunos años después, Eyal le presentó su hija a Rosenne. Los dos comenzaron una relación romántica y posteriormente se casaron.
Eyal luego regresó a Israel y continuó trabajando para el Mossad hasta los 72 años de edad. Mientras tanto, nunca se detuvo de expandir su propia colección personal, la que para sorpresa de muchos, nunca publicitó.
Algunas de las gemas de la colección incluyen una fotografía de la estación central de autobuses en Beer Sheva, la Ciudad Vieja de Jerusalem y turistas vestidos de bikini en las playas de Tel Aviv.
Eyal murió en 2004 a la edad de 89 años.
Es posible que nunca se revele el alcance del trabajo extraordinario de Eyal en el Mossad, por lo que esta exposición única ofrece a los israelíes una pequeña visión del mundo del servicio secreto a través de la lente de una de sus agentes más prolíficas.
First published: 14:49, 08.02.20
