El estadio Bloomfield de Tel Aviv vivió una noche especial: allí se disputó el Clásico de las Leyendas entre Real Madrid y Barcelona, los dos clubes más importantes de España y de los más prestigiosos del fútbol mundial.
Futbolistas de la década del 90 y primeros años del 2000 se pusieron las camisetas y recrearon uno de los partidos más populares del planeta: el clásico español, que en esta oportunidad terminó 3-2 a favor del Real.
Los brasileños Rivaldo y Ronaldinho fueron los apellidos más destacados del Barcelona, mientras que el brasileño Roberto Carlos y el portugués Luis Figo jugaron para los Merengues.
Alrededor de 26 mil espectadores disfrutaron del evento que fue dirigido por Sapir Berman, la primera árbitra transgénero de la historia del fútbol israelí.