Uno de cada 10 empleados de tecnología en Israel trabaja en el sector de la ciberseguridad, que cada año crea 800 nuevos puestos de trabajo. La demanda supera con creces la oferta, y cuando se trata de ciberseguridad, a menudo no es la escasez de programadores lo que causa la deficiencia. La tasa de innovación en el espacio es lo que está creando la demanda de profesiones completamente nuevas de forma regular, con estimaciones que sitúan la escasez en cientos de empleados, muchos de ellos en estas profesiones relativamente nuevas.
"La cibernética es una profesión en sí misma", dijo Nitzan Amar, un alto ejecutivo de la Dirección Nacional de Cibernética y exjefe de la academia de informática y ciberdefensa de las FDI. "En Estados Unidos, por ejemplo, han definido 64 subespecialidades en ciberseguridad, que incluyen miles de aplicaciones de formación diferentes", añadió.
Amar dijo que el sector cibernético sufre una variación especialmente amplia en el nivel de calificaciones y demandas profesionales requeridas de los empleados. "Estas brechas existen en toda la tecnología, pero en ciberseguridad se acentúan, por el conocimiento que se requiere en las diferentes disciplinas y los rápidos cambios que se están produciendo en el sector", aseguró.
Recientemente, la dirección cibernética ha colaborado con las universidades locales en un esfuerzo por establecer numerosos programas de capacitación. Una de esas universidades es la universidad en línea cibernética ITSafe, fundada por el ex gerente comercial de NSO, Amir Bar-El, junto con los expertos en cibernética Roman Zaikin y Shai Alfasi. ITSafe capacitó a unas 10.000 personas de entre 15 y 40 años a lo largo de 2020, y muchas de ellas buscaron trabajo en el sector.
Contrariamente a la percepción obsoleta de que las herramientas tecnológicas son suficientes para proteger a una empresa, ahora ha quedado claro que el factor humano es igualmente importante. “La tecnología por sí sola ya no es suficiente, y se necesita a alguien que gestione los sistemas de defensa y todos los componentes que se adquieren de las empresas de ciberseguridad”, explica Bar-El.
