Los arqueólogos de la Autoridad de Antigüedades de Israel descubrieron una antigua mansión y una mezquita en la ciudad sureña de Rahat.
La organización gubernamental manifestó que los hallazgos revelan nueva información sobre el período de transición entre el gobierno cristiano y el islámico en la Tierra de Israel a lo largo de los siglos VII y IX.
Los investigadores también informaron que encontraron pruebas de varios asentamientos musulmanes y cristianos en las proximidades de la mezquita. "Descubrimos una casa de labranza de la época bizantina en la que probablemente vivían agricultores cristianos; también tenía una torre fortificada y habitaciones con muros robustos que rodeaban un patio", dijeron los arqueólogos en una rueda de prensa.
"En una colina adyacente, encontramos fincas construidas de forma diferente: creemos que se construyeron cientos de años después, entre los siglos VIII y IX, la primera época musulmana. Las fincas, que probablemente fueron colonizadas por musulmanes, estaban construidas en forma de columna de habitaciones, y junto a ellas había un patio grande y abierto. En las casas también había hornos de cerámica que se utilizaban para cocinar", agregaron.
Los investigadores pudieron deducir la identidad de los antiguos moradores del yacimiento gracias a una mezquita que se descubrió cerca del lugar en 2019. Aquella mezquita fue construida a unos 400 metros al sur de la finca, rodeada por un patio central.
"Las pruebas que recogimos hasta ahora en toda la zona de excavación... arrojan luz sobre el inicio del proceso histórico que tuvo lugar en el norte del Negev con la introducción de una nueva religión -el islam, un nuevo soberano y una nueva cultura- en Israel", según el comunicado de la Autoridad de Antigüedades.
"Poco a poco establecieron su dominio, y lo heredaron de los bizantinos y de la religión cristiana que gobernó la Tierra de Israel durante cientos de años".
El Director General de la Autoridad de Antigüedades, Eli Eskosido, contó que la cooperación con los habitantes de Rahat les permite incorporar juntos la antigüedad y la modernidad en el desarrollo de su ciudad.