Alrededor de 30 mil judíos creyentes visitaron Uman durante septiembre, en ocasión de la tradicional peregrinación y celebración de Rosh HaShaná (año nuevo judío) en la ciudad de Ucrania en la que fue enterrado el rabino Najman de Breslav.
De todos los fieles que llegaron a Uman, a diferencia de otros años, hubo unas 2 mil mujeres y numerosos niños. Esto ocurrió porque muchas familias enteras decidieron viajar con un mes de anticipación, por el temor a restricciones para salir del país en las fechas cercanas a las festividades judías.
¿El resultado? Nueve bebés israelíes nacieron en la ciudad ucraniana. Feige, israelí y perteneciente a la corriente jasídica de Breslav, viajó con su esposo e hijos mientras cursaba un embarazo. “Decidimos quedarnos aquí para dar a luz y nos vamos a quedar a vivir”, contó la madre de otros cinco hijos.
“Ni siquiera vamos a regresar a Israel para ordenar nuestros asuntos. Mi hijo mayor de 17 años se quedó en el país vendiendo nuestros muebles, autos y todas nuestras pertenencias”, aseguró poco después del parto de Libi, su sexta hija.
Feige se sorprendió al descubrir que en Uman funciona un sistema de voluntariado israelí y de la comunidad judía local para asistir a mujeres judías que dan a luz en la ciudad. La red de asistencia incluye un hotel de recuperación para madres que parieron recientemente.
Dana Weber, de 28 años, es una mujer israelí que vive en Ucrania desde hace 5 años. Ella dio a luz hace cinco meses y decidió ayudar a otras israelíes, como Feige, que atraviesan un parto lejos de Israel. Ambas solamente tienen palabras cálidas y de agradecimiento hacia el personal que trabaja en el hospital regional.
De todos los fieles que llegaron a Uman, a diferencia de otros años, hubo unas 2 mil mujeres y numerosos niños. Esto ocurrió porque muchas familias enteras decidieron viajar con un mes de anticipación, por el temor a restricciones para salir del país en las fechas cercanas a las festividades judías.
“A las familias israelíes les dan las mejores habitaciones. Y el servicio es gratuito, incluso si se trata de una cesárea”, cuenta Weber sobre estos nacimientos que automáticamente otorgan a los niños el derecho a la ciudadanía ucraniana, situación que libera de problemas a toda la familia en sus futuros intentos de ingresar al país.
Inna Dobrianski, directora del Hospital Regional de Uman, confirma que durante septiembre se registraron nueve partos de mujeres israelíes ultraortodoxas. “Es un número récord de nacimientos en la ciudad”, explica la doctora ucraniana, quien destacó que las mujeres ortodoxas piden ser atendidas por personal femenino y el hospital cuenta con 7 médicas y 14 anestesiólogas para responder a la demanda.
Shaindy y Abirami Landau abrieron voluntariamente un hotel para madres judías que dan a luz en Umán. “Muchas mujeres cuyos maridos no querían perderse el festejo de RoshHaShaná en Uman viajaron en las últimas semanas para dar a luz aquí”, contó Shaindy, ideóloga de este sitio de asistencia a la maternidad.
“Cuando di a luz aquí sentí la falta de una madre o una hermana, no tenía a nadie para que estuviera conmigo, entonces construimos este hogar en el que cada madre puede alojarse y alimentarse durante diez días”, relató sobre el proyecto.
