Los pasajeros del vuelo LY003 de El Al que partió este lunes desde el aeropuerto internacional Ben Gurion hacia Nueva York fue seleccionado para participar en una prueba piloto: la realización de un test para detectar COVID-19 cuyo resultado se conoce 15 minutos después del hisopado.
El piloto, que la aerolínea de bandera israelí bautizó “Extra Car”, busca pacientes asintomáticos con el virus en sus cuerpos y se practicó en pasajeros que hasta la fecha no se vacunaron. Se implementó como medida adicional al requisito de presentar un hisopado negativo realizado 72 horas antes del vuelo.
El método de prueba consiste en la búsqueda del antígeno del COVID-19. A diferencia de las pruebas de PCR conocidas, este método permite encontrar la proteína del coronavirus en apenas 15 minutos. En caso de un resultado positivo, el pasajero en cuestión y sus acompañantes no podrán subirse al avión.
Tomer despegó a Nueva York, no está vacunado y aceptó participar del piloto, que por el momento exige el consentimiento de los pasajeros. “Fue un proceso bastante simple, creo que es una buena solución para aquellos que planean volar pronto”, afirmó. Tras someterse al hisopado, debió esperar un cuarto de hora hasta recibir el resultado negativo en su teléfono móvil y así continuar su proceso de embarque.
Avigal Soreq, CEO de El Al, no descartó que este paso se convierta en obligatorio para todo los vuelos de la compañía. “Es demasiado pronto para saberlo, pero estamos buscando la manera de convivir con el coronavirus y al mismo tiempo encontrar soluciones para las industrias del turismo y la aviación”, afirmó.
Gili Regev, profesional del hospital Sheba Tel Hashomer que participa del proyecto, explicó que la idea de esta prueba rápida es “otorgar tres capas de protección para asegurarse que el virus no esté en el vuelo”, en referencia a la vacuna, la prueba PCR y la prueba de antígeno. “Es como una prueba de embarazo, en un cuarto de hora ya hay una respuesta”, detalló.