Los hallazgos preliminares de un estudio realizado por las autoridades de salud israelíes muestran que actualmente no hay una variante de coronavirus en el país que sea resistente a las vacunas, informó el Canal 12 el domingo por la noche.
Israel lanzó una exitosa campaña de vacunación en diciembre y hasta ahora ha inoculado a más de la mitad de la población, lo que permite al gobierno reabrir gran parte de la economía.
Según el informe, la investigación se llevó a cabo en el transcurso de un mes y fue facilitada por el Ministerio de Salud.
Como parte de la investigación, se recolectaron muestras de ADN de personas que se han recuperado o que han sido vacunadas contra el coronavirus. Luego, las muestras se llevaron al laboratorio central de secuenciación de ADN del ministerio en el Centro Médico Sheba, cerca de Tel Aviv, para ser examinadas.
Si la secuenciación hubiera revelado una mutación específica con alta prevalencia (que podría reflejar una alta incidencia o supervivencia prolongada de una enfermedad sin cura), habría indicado que la variante era resistente a la vacuna o a los anticuerpos desarrollados por quienes se recuperaron del virus.
Pero según los resultados iniciales, las cepas encontradas dentro de las muestras coincidían con su dispersión entre la población general. En otras palabras, no hay evidencia actual que sugiera que exista una mutación resistente a la vacuna en el país.
Sin embargo, el Ministerio de Salud expresó que continuará examinando los datos para asegurarse de que los resultados preliminares sean precisos.