El centro médico Sheba, en Tel Hashomer, adquirió un robot-médico para tratar a los tres israelíes que contrajeron el coronavirus en el crucero que se encuentra varado en Japón. Se estima que los pasajeros llegarán el jueves al centro nacional para el tratamiento de pacientes con COVID-19 (el nombre oficial del virus) que fue creado en el hospital.
El nuevo centro incluye una sala de aislamiento con camas y sistemas de ventilación que generan una circulación permanente de aire con el fin de reducir al mínimo el riesgo de contagio a través de la saliva.
Todos los miembros del personal médico encargado de supervisar a los pacientes estarán equipados con trajes de protección.
Según el plan, los israelíes que se encuentran en cuarentena aterrizarán el jueves en el aeropuerto Ben Gurión, y desde allí serán enviados en ambulancias protegidas directamente al centro en el hospital Sheba para permanecer en aislamiento por aproximadamente dos semanas.
Con el propósito de reducir al mínimo el contacto entre el personal médico y los pacientes, el hospital Sheba adquirió un sistema robotizado de la empresa InTouch. El sistema se controla de forma remota, y de este modo el médico puede observar al paciente, quien a su vez puede ver al profesional a través de un monitor y dialogar con él.
El robot permite, además, revisar al paciente de forma remota, ya que se le puede adherir un estetoscopio y dispositivos para medir la presión arterial, el pulso, la saturación y la fiebre. El aparato puede, además, revisar los oídos y la garganta.
El robot transmite imágenes de video de alta calidad en directo para permitirle al médico trabajar de la mejor manera.