Hace un mes en Israel parecía que el coronavirus ya era historia, cuando el domingo 13 de junio el Ministerio de Salud registró apenas tres casos de coronavirus en todo el país, la cifra más baja en un año.
Pero la variante Delta penetró en el país y ayer las cifras oficiales verificaron 730 nuevos contagios. ¿Qué pasó en el medio? Al igual que en la primera ola en marzo de 2020, el mes pasado el virus ingresó al país a través del aeropuerto internacional Ben Gurión.
En la semana iniciada el 13 de junio se diagnosticaron 174 nuevos casos, un 100% más que los 87 verificados la semana anterior. Y el 19 de junio ocurrió un hecho bisagra: una congestión de pasajeros en el aeropuerto derivó en que las autoridades liberaran las puertas y más de mil personas ingresaron a Israel sin someterse a una prueba de COVID-19, tal como estipulan las pautas de salud.
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El 19 de junio una falla en los controles del aeropuerto Ben Gurión provocó que más de mil personas ingresaran a Israel sin testearse contra el coronavirus.
(Yoav Limor)
Pocos días después de esta grave falla operativa en el aeropuerto aparecieron focos de infección en las ciudades de Binyamina y Modi´in. La mayoría de los contagiados eran menores de edad y en ambos casos el origen del brote fueron personas que regresaron de un viaje al exterior. Así fue que la variante Delta se extendió por otros lugares del país.
En la semana del 20 al 26 de junio hubo otro salto brusco en la cantidad de casos diagnosticados: 999 personas contagiadas, seis veces más que los 174 de la semana anterior. Así fue que el viernes 25 de junio el Ministerio de Salud ordenó que se retomara la obligación de utilizar mascarillas en espacios cerrados. Pero no fue suficiente: en la semana que comenzó el 27 de junio se detectaron 1.844 nuevas infecciones. El promedio diario, cercano a 263, fue mayor que el total semanal de apenas dos semanas antes.
El 19 de junio ocurrió un hecho bisagra: una congestión de pasajeros en el aeropuerto derivó en que las autoridades liberaran las puertas y más de mil personas ingresaron a Israel sin someterse a una prueba de COVID-19.
Los casos siguieron aumentando y la semana pasada se registraron 3.158 pruebas positivas, aproximadamente un 70% más que en la semana anterior. Desde el domingo pasado hasta la tarde del martes se diagnosticaron 1.435 nuevos casos de coronavirus, un promedio de 478 por día, la mayor cifra desde el 25 de marzo.
De todas formas, también hay noticias alentadoras: si bien la variante Delta también afectó a personas vacunadas, el número de pacientes con enfermedades graves derivadas del COVID-19 no aumentó de manera tan brusca en comparación a oleadas anteriores del virus, principalmente debido a la protección que otorgan las vacunas que ya se aplicaron a millones de israelíes.
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Gracias a las vacunas, los casos graves de COVID-19 aumentaron poco en relación al crecimiento de infecciones totales.
(Amit Shaabi)
El 12 de junio había 28 pacientes infectados con COVID-19 en grave estado y el Ministerio de Salud informa que esa cifra trepó a 45, y se espera que empiece a descender pronto. En comparación, en la primera ola la cantidad de pacientes graves saltó en diez días desde 27 a 111, y alcanzó un récord de 192. En la segunda ola el salto fue de 39 a 113 en pocos días, y en la tercera ola los casos graves crecieron de 402 a 1.172 a lo largo de un mes.
A su vez, el aumento de la morbilidad que produjo la variante Delta provocó que varios israelíes indecisos decidieron vacunarse contra el coronavirus. Desde el 12 de junio unos 255.480 israelíes decidieron recibir la primera dosis de la vacuna, y 52.889 recibieron la segunda. De ese grupo, unos 172 mil son menores de entre 12 y 15 años.
El 74% de los jóvenes de 16 a 19 años, el 77% del rango de 20 a 29, el 84% de la franja de 30 a 49 años, y el 88% de los mayores de 50 años ya se vacunaron contra el coronavirus. Sin embargo, todavía hay 1.130.000 israelíes con indicación de vacunarse que todavía no se aplicaron la primera dosis, de los cuales 237 mil son mayores de 50 años y corren riesgo de enfermedades graves derivadas del virus.
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Ante el rebrote por la variante Delta, más de 250 mil israelíes decidieron vacunarse en el último mes.
(Moti Kimchi)
