Israel informó el domingo que ya están a disposición las dosis de refuerzo de la vacuna contra el coronavirus para adultos con sistemas inmunológicos deprimidos y continúa en evaluación la aplicación de una tercera dosis al público general.
La propagación de la variante Delta marcó un nuevo impulso en la campaña de vacunación en Israel, a la par de un incremento en el número de contagios que se situaba en valores diarios de un dígito hace un mes y registra hoy unos 450 casos por día.
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Aplicación de la vacuna contra el coronavirus en un hogar de ancianos.
(Motti Kimchi)
"Estamos administrando una tercera dosis a personas que se han sometido a trasplantes de órganos o padecen una afección médica que provoca una disminución de la inmunidad"
Nitzan Horowitz, ministro de Salud
El ministro de Salud, Nitzan Horowitz, anunció que los adultos con factores de inmunodeficiencia que ya recibieron dos dosis de la vacuna de Pfizer podrían recibir una dosis adicional de refuerzo.
Pfizer y BioNTech, los principales proveedores del rápido despliegue de la campaña de vacunación modelo que llevó a cabo Israel, informaron el jueves que solicitarán a los organismos de regulación de Europa y Estados Unidos la autorización para una tercera dosis.
En la solicitud, los laboratorios argumentaron un descenso en el nivel de protección de la vacuna transcurridos los seis meses desde su aplicación. Tras recibir críticas de ámbitos científicos y de autoridades sanitarias, las empresas no hicieron públicos los datos en que se basaron y sostuvieron que pronto los darían a conocer.
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Una adolescente recibe la vacuna contra el coronavirus en un centro de vacunación itinerante en Haifa.
(Ido Erez)
Acerca de la aplicación de una tercera dosis al público general, el ministro de Salud expresó: “Los estamos evaluando y todavía no tenemos una respuesta final. De cualquier manera, estamos administrando desde ahora mismo una tercera dosis a personas que padecen inmunodeficiencia. Se trata, por ejemplo, de personas que se han sometido a trasplantes de órganos o padecen una afección médica que provoca una disminución de la inmunidad".
Según datos del Ministerio de Salud, aproximadamente la mitad de los 46 pacientes graves que hay en este momento en Israel por COVID-19, están vacunados. Nachman Ash, director nacional de la lucha contra la pandemia señaló que se trata de personas con condiciones de salud previas y mayores de 60 años.
El ministro de Salud dijo, por otra parte, que cubriría con dosis de Moderna un faltante de vacunas Pfizer para completar el esquema de vacunación de dos dosis de una parte de la población adulta general.
El primer ministro Naftalí Bennett expresó el domingo a su gabinete, en declaraciones que fueron transmitidas al público, que acordó con Pfizer adelantar la próxima entrega que se esperaba para septiembre al 1° de agosto. Pfizer no respondió a un pedido de comentarios.
Israel espera que esa entrega permita vacunar a más jóvenes antes del inicio del año escolar en septiembre. Según las regulaciones israelíes, los menores de 16 pueden recibir la vacuna de Pfizer pero no la de Moderna.
