Un nuevo estudio publicado esta mañana (martes) por el Laboratorio Central de Virus del Ministerio de Salud muestra que entre julio y enero de este año se detectaron 181 casos de una variante del COVID-19 que se desarrolló en Israel. Cabe destacar que la vacuna es efectiva contra la variante, por lo que su prevalencia casi ha desaparecido, entre otras cosas por el predominio de la variante británica, que según el Ministerio de Salud ha producido el 90% de todas las infecciones en Israel.
Desde enero, se han identificado varios casos adicionales de la variante israelí, pero en general el número de nuevas infecciones está disminuyendo significativamente.
El nombre de la nueva variante es P681H y los resultados del estudio indicaron que "la cepa israelí no produce tasas de infección más altas".
Según el Ministerio de Salud, "la variante israelí tiene una incidencia baja, no es relevante a nivel clínico o epidemiológico, no produce una infección generalizada o una enfermedad grave y no es resistente a la vacuna”.
El ministerio agregó que "la variante israelí aparece en muestras de julio, pero está desapareciendo. La mutación británica es la dominante en lo que a morbilidad se refiere, y desde febrero de este año ha producido más del 90% de las infecciones en Israel”.
"Siempre hay mutaciones", explicó la profesora Gili Regev, directora de la Unidad de Control y Prevención de Infecciones del Centro Médico Sheba de Tel Hashomer. "El hecho de que se haya encontrado la misma mutación en varias personas y que la misma sea similar a las de otras variantes es su singularidad. Además, que haya evolucionado aquí no sorprende, y al principio, por supuesto, hay preocupaciones relacionadas con la efectividad de la vacuna contra ella. El desarrollo de mutaciones locales es un proceso natural y sucede todo el tiempo. Por lo tanto, tenemos que estar atentos y detectarlas rápidamente”.
En un informe publicado en enero, el Directorio de Inteligencia Militar advirtió que había preocupaciones respecto del desarrollo de una variante local. "Además de importar una variante resistente del exterior, también es posible que se desarrolle una mutación de este tipo en Israel”, expresó en aquella oportunidad. Esto se debe a que aún hay una gran cantidad de personas que no han sido inoculadas y a que la propagación del virus continúa mientras se lleva a cabo la campaña de vacunación.