Ucrania marcó el miércoles el 80 aniversario de la matanza de personas en el barranco boscoso de Babi Yar, en la Kiev ocupada por los nazis. Se trató de una de las mayores masacres de judíos durante el Holocausto.
"Dos palabras, detrás de las cuales hay más de 100.000 vidas humanas. Dos palabras, detrás de las cuales hay millones de destinos paralizados. Dos palabras, seguidas de 80 años de dolor para los pueblos judío y ucraniano. Babi Yar"
Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania
Las tropas nazis en Babi Yar mataron a tiros a casi 34.000 hombres, mujeres y niños judíos entre el 29 y el 30 de septiembre de 1941. Durante los dos años siguientes, alrededor de 150.000 personas en total, en su mayoría judíos, entre los que se encontraban ciudadanos ucranianos, rusos, polacos y romaníes, fueron asesinados allí.
"Dos palabras, detrás de las cuales hay más de 100.000 vidas humanas. Dos palabras, detrás de las cuales hay millones de destinos paralizados. Dos palabras, seguidas de 80 años de dolor para los pueblos judío y ucraniano. Babi Yar", manifestó el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.
"Dos palabras cortas que suenan como dos disparos, pero que han estado arrastrando largos y horribles recuerdos por generaciones", agregó Zelenski.
En silencio, Zelenski participó en una ceremonia cerca de un monumento que consiste en una menorá (candelabro de siete brazos de la cultura hebrea) erigida para honrar a las personas asesinadas. Soldados, niños y familiares de las víctimas depositaron flores y coronas de flores.
Zelenski es el primer presidente étnicamente judío de Ucrania. La mayor parte de la familia de su abuelo murió durante la guerra.
"La maquinaria de la muerte en Babi Yar no se detuvo hasta la liberación de Kiev de los ocupantes. La parcela de tierra de Kiev se convirtió en uno de los epicentros del Holocausto en Europa del Este", afirmó el Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania.