Un anillo de oro fue encontrado durante los trabajos de preservación en el campo de concentración de Auschwitz recientemente, según contó Wojciech Soczewica, Director General de la Fundación Auschwitz-Birkenau.
Los equipos que renovaban uno de los barracones también encontraron una navaja de madera.
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Un anillo encontrado en Auschwitz perteneciente a un prisionero judío del gueto de Lodz.
(Museo de Auschwitz)
"Después de las lluvias o cuando la nieve se derrite, el suelo revela objetos", explicó Soczewica. "Encontramos cosas nuevas todo el tiempo en nuestro trabajo de conservación", agregó.
El anillo, que tiene unas marcas especiales, se encontró durante los trabajos realizados en una barraca y se identificó como fabricado en el gueto de Lodz.
"Fue introducido en el campo por un prisionero que lo escondió bajo el suelo. En nuestros trabajos de conservación del lugar, y al retirar las piedras para aislarlas de la lluvia y el barro, encontramos este glorioso anillo", sostuvo.
En otro barracón, dentro de la insolación del techo, encontraron una navaja que tenía grabado el nombre de Yakkov Zeliko.
"Identificamos al prisionero número 117966 por ese nombre, en los registros", comentó Soczewica.
"Llegó desde Checoslovaquia el 24 de abril de 1943 y luego fue enviado al campo de concentración de Neuengamme, en Alemania, el 25 de agosto de 1944, antes de ser enviado a Buchenwald", confesó.
"Cuando los nazis planificaron los barracones utilizaron un aislamiento especial para protegerlos de la humedad. Estaba hecho de hormigón, trozos de madera y arena, todo pegado. Los techos estaban muy fracturados y cuando los encargados de la conservación los retiraron, encontraron el cuchillo, que fue escondido por uno de los prisioneros", sumó.
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Objetos encontrados en Auschwitz durante los trabajos de conservación.
(Museo de Auschwitz)
"Todos los días, cuando se recorren los caminos, se encuentra algo. A veces, cucharas u objetos que eran comunes. No nos sorprendió", manifestó.
"Estuvimos trabajando en un yacimiento que fue tapado en los años 60. Se hicieron excavaciones arqueológicas y se sacaron miles de artefactos del suelo, se empaquetaron y se enviaron a la academia de Varsovia, donde permanecieron durante años. La fundación los trajo de vuelta hace unos años y ahora los estamos examinando como parte de nuestros esfuerzos de preservación", cerró.
