Unas semanas después de una boda ortodoxa a la que asistieron muchos jaredíes de Brooklyn, Nueva York, se reveló que el novio era en realidad un musulmán libanés que simulaba ser ortodoxo y había vivido durante varios años en Texas, donde había logrado involucrarse en la comunidad ortodoxa. La familia descubrió el fraude después de que la novia revelara que había encontrado un pasaporte libanés con otro nombre en su habitación, por lo que sus familiares huyeron con ella y la trasladaron a un apartamento para ocultarla.
Según el rabino que lo acompañó al novio a la jupá (palio nupcial), el novio conoció a la novia en un sitio de citas, y ella, que proviene de una familia de ascendencia siria, en ningún momento sospechó de él y pensó que se trataba de un hombre judío de ascendencia libanesa. Los informes de los medios ortodoxos estadounidenses indican que el propósito del fraude no está claro y que el Buró Federal de Investigaciones (FBI) abrió una investigación sobre el asunto. Se desconoce el paradero del novio.
La mujer pensaba que "Eliyahu Haliva" era un judío del Líbano. Su apariencia era completamente ortodoxa e incluso hablaba hebreo con fluidez. También tenía una historia convincente sobre las circunstancias que lo llevaron a mantenerse alejado de su familia Además, había estado relacionado con la comunidad jaredí en Texas durante aproximadamente 6 o 7 años.
Estuvo involucrado en la comunidad de Texas
Tras la difusión del caso en las redes sociales en Estados Unidos, y también en Israel, se reveló que emisarios del movimiento jasídico Jabad Lubavitch habían participado en su boda y se habían encargado de todos los aspectos organizativos de la misma.
Un alto funcionario de Jabad Lubavitch aclaró que "el movimiento no llevó a cabo la conversión del libanés chiíta que simulaba ser ortodoxo, no lo casó y no estuvo relacionada con el asunto de su identidad”.
"Este es un caso extraño y desafortunado de un joven confundido que hizo una conexión virtual con una muchacha de la comunidad siria, y ella se horrorizó al descubrir solo después de la boda que él no era judío. Uno de los rabinos de Jabad en Texas al que se le pidió que acompañara al novio a la jupá señaló que el hombre no tenía familia en Estados Unidos", expresó.
El rabino de Jabad Lubavitch en Texas, Joseph Lazarov, dijo que el Centro de Estudiantes Judíos de Jabad en Texas está abierto a todos los profesores y estudiantes judíos que buscan explorar el judaísmo.
Lazarov dijo que en 2018 un estudiante que se presentó como "Eliyahu Haliva" comenzó a visitar Jabad Lubavitch y otras instituciones judías en los campus locales, y en uno de ellos incluso se desempeñó como presidente. Además, ocasionalmente asistía a las comidas de Shabat en Jabad, e incluso solía asistir a oraciones o lecciones de Torá.
"El rabino tenía que comprobar su identidad judía"
El rabino manifestó que el año pasado, el hombre conoció a una mujer de Nueva York en un sitio de citas judío y se presentó ante ella como un observador de mizvot (mandamientos). “Ante la consulta de la mujer y su familia, les informé que su comportamiento no reflejaba el comportamiento de un judío observador de la Torá", agregó Lazarov.
"La responsabilidad básica del rabino que se encarga del kidushín (formalidades del noviazgo y el matrimonio) es determinar el estatus judío y personal de la pareja. Debe asegurarse de que ambos sean judíos, solteros y que se les permita casarse de acuerdo con la halajá (ley judía). Por lo tanto, cuando el rabino A., de la comunidad siria en Nueva Jersey, me preguntó si Eliyahu era judío, le informé explícitamente que no lo sabía y que quien se casara con él tendría que hacer una investigación adecuada y confirmar el asunto de forma independiente”, sostuvo.
"La boda fue realizada por el hijo del rabino A., y como mi esposa y yo estábamos en Nueva York, fuimos invitados. El novio no tenía familia, y a pedido de la pareja lo acompañamos a la jupá e incluso firmé la ketuba (contrato de matrimonio judío), que fue redactada por el rabino A. Nuestra participación se basó en el entendimiento de que, como rabinos supervisores, ellos habían realizado las pruebas necesarias para confirmar la condición judía del novio", añadió.
Lazarov concluyó que "en las semanas siguientes quedó claro que la novia sabía que Eliyahu estaba usando un nombre falso y estaba ocultando información. Nuestros corazones están con ella, su familia y todos los que han sido engañados por esta persona”.
